El nuevo presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, nombrará ministro de Asuntos Exteriores al expresidente del Parlamento Europeo Josep Borrell, recuperará el ministerio de Igualdad y mantendrá la intervención de las cuentas públicas de la región de Cataluña.
El líder socialista, que ultima la composición de su gabinete, inició hoy su actividad oficial al reunirse en Madrid con el presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, en una visita de trabajo a España programada con anterioridad.
Según medios españoles, Sánchez designará ministros a algunos de sus colaborares más cercanos y Borrell, nacido en Cataluña en 1947, se encargará de la cartera de Exteriores, confirmaron a Efe fuentes socialistas.
Borrell es ingeniero aeronáutico y doctor en Ciencias Económicas, fue ministro de Obras Públicas (1991-1996) y se ha mostrado muy activo contra el independentismo catalán.
Sánchez es jefe del Ejecutivo desde el sábado, tras ganar una moción de censura parlamentaria contra el gobierno conservador de Mariano Rajoy, con el apoyo del Partido Socialista (PSOE), Unidos Podemos (izquierda), los independentistas catalanes de PDeCAT (centroderecha) y ERC (izquierda) y PNV (nacionalistas vascos), entre otros.
El PSOE presentó la moción el 25 de mayo, al día siguiente de que la Justicia condenara al Partido Popular (PP), que preside actualmente Rajoy, por beneficiarse económicamente de una trama de corrupción que actuó entre 1999 y 2005.
Sobre Cataluña, el dirigente socialista José Luis Ábalos, hombre de confianza de Sánchez, dijo hoy que el control de las cuentas públicas se levantará en función de cómo se vaya normalizando la situación en esa comunidad autónoma española, donde un nuevo gobierno regional recobró la gestión autonómica el sábado pasado.
El anterior Ejecutivo español gestionaba hasta ese día la administración catalana -desde el 27 de octubre de 2017- para frenar el proceso independentista ilegal catalán, amparado en el artículo 155 de la Constitución y con el apoyo de socialistas y liberales.
En declaraciones a Antena 3 TV, Ábalos aseguró que los socialistas mantienen una posición firme contra la independencia de Cataluña y no ha habido alianzas ni negociaciones con los secesionistas.
El presidente regional de Cataluña, el independentista Quim Torra, urgió hoy una reunión con Sánchez para hablar “de gobierno a gobierno” y “negociar”.
Sobre la intención del nuevo Ejecutivo español de mantener intervenidas las cuentas catalanas, dijo Torra que el levantamiento del articulo 155 -el sábado pasado, cuando tomó posesión el gobierno catalán- lleva aparejado suprimir también “las medidas que se tomaron unos meses antes” de su aplicación.
El Ministerio español de Hacienda, que controla mensualmente las finanzas catalanas desde noviembre de 2015, asumió directamente los pagos del gobierno de Cataluña en septiembre de 2017 para evitar que se destinaran a financiar políticas orientadas a la independencia ilegal de Cataluña.
Según Torra es “muy importante” conocer el proyecto del nuevo Gobierno español para Cataluña respecto al “derecho de autodeterminación” y sobre los políticos encarcelados provisionalmente acusados de rebelión y malversación por el proceso independentista catalán.
Mientras tanto, Sánchez mantiene la idea de gobernar en solitario, a pesar de que los socialistas españoles solo disponen de 84 de los 350 diputados del Congreso, frente a los 134 escaños del PP de Rajoy, ahora en la oposición.
Los socialistas tendrán que negociar a fondo con otros partidos si quieren derogar, por ejemplo, la reforma laboral y la de pensiones del PP.
Sánchez también creará un Alto Comisionado para la Pobreza Infantil y tiene la intención, según Ábalos, de proponer que Podemos y otras fuerzas políticas puedan participar en la renovación de miembros del Tribunal Constitucional, el Consejo General del Poder Judicial y el Consejo de Administración de Radio Televisión Española.
Sobre un eventual convocatoria de elecciones generales antes de que termine la legislatura (2016-2020), Ábalos comentó que Sánchez lo hará “cuando se pueda”, ya que su prioridad es “no generar inestabilidad”.
Además de la cuestión catalana, el gobernante español tendrá el reto del crecimiento económico y la estabilidad presupuestaria. En el debate de la moción de censura manifestó que mantendrá el proyecto de Presupuestos de 2018 del anterior gobierno conservador, que se tramita ahora en el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta. EFE