Existe un dicho muy famoso en el fútbol que narra una verdad fulminante: Si no haces, te hacen, y hoy Argentina no hizo nada, pero le propinaron un daño futbolístico y moral tremendo.
Esta Albiceleste deambula como alma en pena en el rectángulo de juego, por más que se espere de un milagro “Messiánico“, no llega, y Croacia desnudó las falencias y dependencias de un combinado que fue humillado con un marcador 0-3 lapidario.
Lucho Suárez | LaPatilla.com
Gran funcionamiento, pero faltó el 10: La Campeona del Mundo en el 86′ había demostrado en la primera mitad, que la cara plasmada en la pasada jornada quedaba atrás, pero todavía no entraba en acción el distinto, el que resuelve las cosas en los momentos más difíciles… Leo Messi, no encendió los focos.
Tanto los blanquiazules como los cuadriculados tuvieron oportunidades de imponerse en la pizarra, pero las imprecisiones de lado y lado favorecieron a la desesperación en las gradas que, esperaban más acción en el rectángulo de juego.
Los errores se pagan caro: Amanecía el tiempo de complemento cuando los europeos vacunaron.
Transcurría el 52′ cuando Willy Caballero recibió un pase de Nicolás Tagliafico del cual no pudo deshacerse eficientemente; éste quiso bombear la bocha por encima de Ante Rebic, pero la cedió al ariete quien de volea la mandó a guardar, el remedio fue peor que la enfermedad.
Si se hablaba de merecimiento en cuanto al partidazo de Perú, los pupilos de Jorge Sampaoli merecen los boletos, pero de regreso a casa, porque se arrastraron por la cancha tras el primer golpe.
Luka Modric colocó el segundo clavo al ataúd patagónico con un martillazo desde unos 25 metros al palo izquierdo del calamitoso portero Caballero, y para enterrar la ilusión argentina, Iván Rakitic hizo desastres en el área blanquiazul para dejar desparramados a los zagueros y sentenciar el calvario sureño.
Para colmo, Argentina aún tiene posibilidades de cruzar la frontera de la fase de grupos hacia octavos, es insólito, pero dependen de dos resultados: Primero, Nigeria debe superar con creces a la sorprendente Islandia el jueves 22, y posteriormente, los sudamericanos necesitan triunfar de igual forma frente a los africanos en su tercer y posible último cotejo.
¿Creen en la suerte?
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