El nuevo bono de alimentación no te alcanzará ni para comprar café

El nuevo bono de alimentación no te alcanzará ni para comprar café

CARACAS (VENEZUELA), 19/11/2017.- Fotografía del 17 de noviembre de 2017, que muestra bolsas de café a la venta en un puesto informal en una calle de Caracas (Venezuela). Venezuela es el país del mundo con mayores reservas de petróleo, pero el empobrecimiento de sus habitantes les ha abocado a comprar cucharadas de comida para intentar burlar una escasez de alimentos que se ha agravado en los últimas semanas, cuando la economía entró en una espiral hiperinflacionaria. Productos de consumo diario como el café, la harina, la leche y el azúcar son ofrecidos ahora en bolsitas que pesan entre 50 y 150 gramos, cuyos precios suben cada día en los puestos ambulantes de los barrios populares al margen de las regulaciones impuestas por el Gobierno de Nicolás Maduro. EFE/Cristian Hernández

 

El nuevo bono de alimentación –que subió de 1.555.500 a 2.196.000 bolívares después de que el presidente Nicolás Maduro anunció un incremento salarial el miércoles pasado– no alcanza para hacer un mercado completo. Los consumidores se ven obligados a comprar un solo producto, unidades o simplemente gramos.

Por Eduardo Seijas Meneses / El Nacional





En el mercado municipal de Chacao una vendedora de café ofrecía 100 gramos por 1,6 millones de bolívares. “Si los precios ya estaban aumentando prácticamente cada 3 días, ahora subirán el triple debido a ese incremento salarial”, advirtió.

Con los 596.000 bolívares que le sobrarían al consumidor después de adquirir los 100 gramos de café, podría comprar un plátano, que ayer lo expendían en 350.000 bolívares, y una zanahoria, que según una vendedora puede costar 200.000 bolívares, dependiendo de lo que pese.

Con el salario integral, que pasó a 5.196.000 bolívares, tampoco se puede comprar mucho. Ni siquiera alcanza para medio kilo de café. La vendedora del mercado de Chacao dejaba atónito al que preguntaba por el precio. “8 millones de bolívares, y el kilo está en 16 millones de bolívares”, respondía. “¿Ya está en 16 millones?”, espetó una clienta.

Una vendedora de hortalizas, señalando los productos que ofrecía, expresó: “Aquí son puros millones”. La coliflor la vendía en 3 millones de bolívares, justo el monto del nuevo salario mínimo. Una compañera aseguró que todos los precios seguirán aumentando si el presidente no estabiliza el dólar. Está preocupada porque el antibiótico que debe tomar su hija, la última vez que lo vio costaba 20 millones de bolívares, posiblemente suba a 40 millones de bolívares.

Cuando se le preguntó a una consumidora qué puede comprar con el salario mínimo, inmediatamente se rió. “Ni un cartón de huevos, contestó. Ayer el de 30 unidades estaba en 4 millones de bolívares y el medio en 2 millones. “El aumento salarial es una burla y una falta de respeto”, subrayó.

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