Venezolanos abandonan sus puestos de trabajo por crisis del transporte público

Venezolanos abandonan sus puestos de trabajo por crisis del transporte público

Las recurrentes fallas registradas en el Metro de Caracas en los últimos días agravan aún más la precaria situación de los venezolanos para llegar a sus puestos de trabajo, por lo que muchos se plantean el abandono de sus actividades laborales.

“El presidente Nicolás Maduro debe aprovechar el cambio de gabinete para hacer las modificaciones en materia económica que necesita el país y mejorar las condiciones de vida de los venezolanos”, dijo Linerby Sánchez, directora de Proyectos del Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin).





Camiones de mudanza, de carga animal y hasta las famosas jaulas de cuerpos policiales se ven en las distintas ciudades del país transportando a los venezolanos para llegar a sus sitios de destino, con todo el peligro que ello representa y que ya ha dejado varios fallecidos.

“Se trata de unidades que no cumplen con disposiciones de seguridad para trasladar a personas, pero es la opción más común para que muchos ciudadanos puedan movilizarse”, acota Sánchez.

Ya la hiperinflación que ha devorado 90% del valor de la moneda y destruido el salario como medio de sustento preocupa a cualquier trabajador para que también sume un problema más como lo es el colapso del transporte público.

De acuerdo con representantes del sector, 85% de las unidades de transporte a nivel nacional están paradas por falta de repuestos e insumos para su funcionamiento. Y en el caso de la capital, son más frecuentes los retrasos y paralizaciones del Metro de Caracas que impiden en muchos casos que los venezolanos lleguen a sus sitios de trabajo.

“No solo se trata de que la remuneración es ya insuficiente por una labor que se desempeña con bastantes limitaciones por un entorno adverso, sino que si para llegar a su lugar de trabajo debe pasar más penurias, luego de sopesar costos y beneficios, se termina por abandonar el trabajo formal para dedicarse a actividades informales con menos esfuerzo y mejor compensación monetaria”, advirtió la directora del Inaesin.

Al ingresar al mercado informal, el ciudadano pierde los beneficios sociales por los que el movimiento sindical ha luchado históricamente, quedando más expuesto a su suerte en una economía hiperinflacionaria.

Nota de Prensa