Los aumentos de salario decretados por el gobierno nacional, sin duda generan más hiperinflación de la existente, ocasionada por un modelo económico con resultados muy negativos para el país. Salarios que se diluyen como la sal en el agua, mucho antes de que lleguen a las manos de los trabajadores víctimas de una situación extrema
que destruye al país y sus ciudadanos.
Al momento de escribir estas líneas, un profesional de la enfermería, devenga un salario integral de 3.200.000 bolívares al mes; un médico gana 5 millones integrales, un maestro 7.300.000 bolívares; un policía estadal, devenga un salario integral de 9.900.000 bolívares; un profesor universitario 7.500.000 bolívares, y un profesional de escala II en la administración pública, estaría cercano a los 6.000.000 de bolívares al mes.
Ahora bien, según cifras del CENDA, para el 30 de mayo, la canasta básica familiar había alcanzado la suma de 301.138.353,00 bolívares.
Los venezolanos quisieramos que el gobierno de Maduro, nos explique cómo se cubren las necesidades de una familia con estos salarios que el gobierno nacional anunció por un monto integral de 5.196.000 bolívares como la solución de todos nuestros males.
Esto es una burla, la catástrofe social generada es de pronósticos muy tristes para el país.
Los funcionarios públicos como policías, médicos, enfermeros y maestros, que son pilares fundamentales en el desarrollo de una sociedad, así cómo el resto de la población, languidecen y sufren de grandes necesidades como cualquier refugiado.
Muchos funcionarios de la administración pública y de la empresa privada, abandonan sus puestos de trabajo, buscando alternativas a su desgracia en actividades informales ó sencillamente en desbandada de personas que se suman al exódo, al destierro inducido por el hambre y la miseria en venezuela.
Hay que hacer algo señores del Gobierno, no engañen más al pueblo, pónganse a trabajar ó renuncien en favor de un pueblo que quiere recuperar este hermoso país.
@feeddyspaz