Los propietarios de las estaciones de servicio acordaron no atender público los domingos para compensar el incremento de los costos laborales, señalaron representantes concesionarios de expendios que solicitaron no mencionar sus nombres.
“Los costos laborales aumentaron muchísimo no solo por los incrementos salariales y del bono de alimentación decretados por el gobierno, sino por las dificultades del personal para trasladarse desde sus casas al lugar de trabajo, debido a la falta de transporte colectivo”, dijo el encargado de una bomba en el oste de Caracas.
Otro propietario contó que por las razones anteriores y la inseguridad personal en las ciudades y carreteras, muchas gasolineras 24 horas también permanecen cerradas en la noche. Agregó que evalúan aplicar la medida un día adicional en la semana si no se resuelven pronto los problemas.
Los concesionarios destacaron que las ventas de gasolina y diesel han bajado porque hay menos vehículos que van a llenar el tanque. “Las camionetas y autobuses casi no vienen. Hace un par de meses compraba una gandola diaria de combustible, ahora lo hago cada dos días”. Una cisterna de combustible contiene entre 30.000 y 35.000 litros.
“Con esta reducción del consumo, por supuesto que las largas colas se acabaron”, dijo el dueño de una gasolinera en Caracas. Al ser consultado sobre la adaptación de los registros contables y surtidores a la reconversión monetaria del bolívar fuerte al bolívar soberano que regirá a partir del 4 de agosto, respondió: “De eso todavía no nos han informado nada”.
La situación anómala en las estaciones de servicio se observa en toda Venezuela, alertaron fuentes sindicales del sector petrolero que pidieron no citar sus identidades. “En oriente la gente no saca su vehículo a la calle porque no puede comprar el lubricante, el caucho o el repuesto”, afirmó uno de los trabajadores.
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