“Queremos que el gobierno entienda que la comunidad universitaria udista tiene necesidades, el personal docente, administrativo y obrero no tiene un salario para satisfacer, No tienen un HCM acorde, a lo que se agrega la inseguridad, dentro y fuera de las instalaciones udistas”, afirmó la decana María Coromoto Casado, junto a la intergremial del Núcleo Bolívar.
Más de 400 profesores del núcleo Bolívar han abandonado sus puestos para emigrar a otros países.
“Nos estamos muriendo de hambre, porque el salario que tenemos no nos alcanza para nada”.
Nota de Prensa
En defensa de la universidad y por un salario digno, autoridades, profesores, empleados, obreros y estudiantes del Núcleo de Bolívar de la Universidad de Oriente (UDO) elevaron su voz de protesta este martes en asamblea ante la crisis que agobia al sector universitario en general.
Para la intergremial udista, que agrupa a Apudo, Aspudo, Aseudo, Studo y movimiento estudiantil, el Núcleo de Bolívar, y la Universidad de Oriente en general, no escapa a la caótica situación país, sumado a una hiperinflación que pulveriza los salarios de sus trabajadores y una inseguridad que sigue saqueando sus instalaciones y acosando a su comunidad.
“Esta concentración representa el sentir udista, el sentir de la comunidad universitaria, en defensa del Núcleo y de la UDO. Con esto queremos hacerle ver al gobierno la unidad monolítica que tiene la universidad en defensa de sus intereses y comunidad”, señaló la decana del Núcleo de Bolívar, Profesora María Coromoto Casado.
La autoridad udista señaló que los trabajadores no disponen de un salario que les permita responder a sus necesidades, y esto nos indica “que la economía no está funcionando bien el país”, Bajo este contexto, precisó que mientras exista una hiperinflación los sueldos por mucho que sean aumentando no cubrirán las necesidades.
Esgrimió la falta de recursos financieros por parte del nivel central, y la manera como han venido funcionando. “Si no tenemos para comprar un bombillo, cómo podemos garantizarle a los estudiantes unas aulas de clases adecuadas”, añadió.
Advirtió que a pesar que han registrado una deserción, tanto laboral como estudiantil, que se ubica en un 30% siguen estando por debajo del resto de las universidades autónomas.
Más de 400 profesores han emigrado
Para el presidente de la Asociación de Profesores del Núcleo (Apudo Bolívar), profesor Félix Martínez, cada día se hace más caótica la situación para los universitarios udistas, máxime cuando devengan “salarios de miseria”, no tienen HCM, y deben enfrentar a diario una inseguridad que se hace constante en las aulas, pasillos y espacios universitarios.
Aseguró que se tratan de robos, saqueos o desmantelamiento organizados, y no descarta que el gobierno pudiera estar detrás de estos hechos, ante sus perversas intenciones de buscar intervenir la universidad, y poner en práctica su macabro “proyecto político de una universidad única”.
“La universidad la defenderemos, y no vamos a entregárselas al gobierno”, resaltó. Afirmó que el proyecto del gobierno es llevar a la universidad a la ruina. “No queremos un pensamiento único”, resaltó.
Aclaró que nunca han planteado un paro universitario, y afirmó que la protesta es a puertas abiertas. “Ya viene el periodo de vacaciones, pero al regreso a clases esta lucha seguirá”, prometió el representante del sector profesoral de la Udo Bolívar.
Agregó que los sueldos de miseria y la crítica situación país han logrado que desde el 2017 hasta la fecha 400 profesores de este núcleo abandonen sus puestos de trabajo, y emigraran a otros países en busca de mejor calidad de vida. “Mientras un sargento se le acaba de aumenta su salario a 130 millones, un profesor titular universitario devenga entre 12 y 14 millones mensuales. ¿Es que un militar merece ganar más que un profesor universitario?”, aseveró.
No menos de 100 salarios mínimos
“Nos estamos muriendo de hambre, porque el salario que tenemos no nos alcanza para nada”, afirmó el representante de Studo, gremio que agrupa a los obreros, Jesús Rivas.
Detalló la situación de este sector, y como no se tomó en cuenta la tabla salarial presentada por los gremios al gobierno, y la manera como se ha irrespetado el artículo 91 de la Constitución Nacional. Rivas afirmó que los salarios de los trabajadores universitarios deben estar por encima de los 100 salarios mínimos.
Asimismo, añadió que esta protesta no es política, y no se trata de pedir dádivas, sino exigir un derecho consagrado constitucionalmente.
De igual manera, destacó como el gobierno pretende asfixiar las universidades económicamente, y señaló el caso especificó de la UDO que lleva años funcionando con un presupuesto reconducido.
Los voceros de los gremios de empleados y profesionales administrativos, Sebastián Betancourt (Aseudo) y Bladimir Galido (Aspudo), se hicieron eco de esta lucha, y cerraron filas en defensa de la academia y mejores reivindicaciones salariales.
Para finalizar el dirigente estudiantil, Rocco Salazar, rechazó toda pretensión de intervención del gobierno, y recalcó que la autonomía universitaria no se negocia bajo ningún concepto, “ni para una ayuda, ni para apoyo financiero”.
