Sabemos que los elementos constitutivos del Estado son población, territorio y poder político. Este último está usurpado y puso fin a la alternabilidad. Buena parte del territorio está controlado por mafias y grupos irregulares dedicados al narcotráfico y el crimen. La población ha sido disminuida por el desempleo, la hiperinflación, inseguridad, falta de alimentos y medicinas y lanzado a la diáspora, se rompe el tejido social y destruye las instituciones democráticas. El régimen ha cuasi disuelto la nación venezolana.
También logra respondiendo a su naturaleza, a sus carencias, resentimientos y frustraciones profundas, que la educación chapotee en las aguas de la ignorancia, la pobreza y para ello emplean conductas ominosas contra las universidades y la inteligencia, depauperan a los colegios privados El núcleo de la Universidad Simón Bolívar en el Litoral Central, otrora de excelencia para la formación técnica y profesional, sufre de la carencia absoluta de agua, de la fuga de profesores y la deserción de estudiantes.
El colapso de los servicios públicos conduce a la desesperación por la miseria que deja a su paso, y la gente lo vincula a Maduro, el pueblo cobra conciencia del grado de destrucción de todo lo que toca.
Pdvsa con un daño irreversible en sus entrañas, produce hoy medio millón de barriles menos que el año pasado. Criminalmente sale un barco cargado con 500.000 barriles gratis hacia Cuba, mientras aquí no hay gasolina.
El 2 de julio el TSJ legitimo reiteró que hay vacío constitucional del cargo de presidente porque está incurso en un proceso penal por corrupción y legitimación de capitales, sentenció expresamente que existe una ausencia, una vacante absoluta en el cargo y debe separarse. El TSJ le ordena a la AN llenar el vacío de poder absoluto de quien detenta la presidencia y ejerce como comandante en jefe de la FA. El parlamento deberá proveer la vacante.
El régimen no tiene apoyo popular y no tiene escrúpulos. El colapso del país traerá el colapso de la dictadura, a pesar de someternos a la supervivencia para que vayamos claudicando, hemos retrocedido 50 años. Llevamos 12 trimestres de recesión, dos años y medio de emergencia, 42% de contracción que es miseria.
Requerimos de una estrategia común con una alternativa de cambio. No se derrota una dictadura con parcialidades. Debemos respaldar al pueblo en sus diarias y múltiples protestas, articularnos con sus reclamos. El país está paralizado.
Con Maduro en el poder se agudizan todos los problemas. Algunos politicastros, carentes de desprendimiento y grandeza, trabajan para mantener el régimen, no tienen vocación de poder sino de privilegios. Hay que apartarlos. La lucha es contra la Narco Dictadura.
¡Libertad para los presos políticos y regreso de los exiliados!