Casi una veintena de niños brasileños son reunidos con sus padres en EEUU

Casi una veintena de niños brasileños son reunidos con sus padres en EEUU

 

Diecinueve niños brasileños han sido reunificados con sus padres en Estados Unidos durante las últimas dos semanas, después de que fueran separados en la frontera de ese país, informaron hoy fuentes oficiales.





Otros treinta menores brasileños continúan lejos de sus progenitores o tutores legales en diferentes albergues de Chicago, Houston, Los Ángeles, Miami y Nueva York, según señaló la Cancillería brasileña en un comunicado divulgado este sábado.

“Los agentes consulares mantienen sus visitas regulares a los abrigos, con contactos con cada uno de los menores para asegurar que están recibiendo los debidos cuidados”, indicó la cartera en la nota.

La Cancillería brasileña reiteró, y así se lo hizo llegar al Gobierno de EE.UU., “su firme desagrado con una práctica que considera cruel y en franca violación de instrumentos internacionales de protección a los derechos de los niños”.

El Ejecutivo del presidente Donald Trump tiene hasta el próximo 26 de julio para reunir, por orden judicial, a unos 2.500 menores de entre 5 y 17 años separados de sus padres.

En la víspera, las autoridades estadounidenses informaron que, por el momento, habían reunificado a 450 niños.

En el caso de los menores brasileños, los funcionarios consulares del país suramericano “acompañan de cerca” a todos ellos y aconsejan a los familiares en este proceso de naturaleza “administrativa”.

“En caso de que requieran representación legal, ya fueron identificadas organizaciones con abogados especializados en derecho migratorio que ofrecen servicios ‘pro bono'”, es decir, de manera gratuita”, apuntó la Cancillería.

No obstante, el Gobierno brasileño recordó que no puede obligar a los menores y a sus familiares a volver a Brasil y que la “expresiva mayoría” manifiesta su deseo de permanecer en EE.UU., aunque para ello tengan que aguardar el dictamen de las autoridades locales.

El presidente brasileño, Michel Temer, ya trasladó su preocupación sobre este asunto “extremadamente sensible” al vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, cuando ambos se reunieron hace aproximadamente un mes en Brasilia.

EFE