El director de la Penitenciaria Nacional, la principal cárcel de Honduras, Gustavo Bonilla, fue suspendido del cargo para investigarle como parte de un proceso de replanteamiento del sistema, informó hoy una fuente oficial.
EFE
El Instituto Nacional Penitenciario (INP) decidió suspender de todas sus funciones a Bonilla, afirmó el subdirector de esa institución, Germán McNiel.
Señaló que Bonilla fue suspendido por tiempo indefinido “para efectos de investigación” como parte de un “proceso de replanteamiento en el tema de seguridad” del Estado de Honduras con el propósito de “brindar tranquilidad y paz” al pueblo hondureño.
McNiel dijo que no puede asegurar que el hasta ahora director de la Penitenciaría Nacional, ubicada al norte de Tegucigalpa, haya sido separado del cargo por cometer algún hecho ilícito.
El Instituto Penitenciario se encuentra en un proceso de revisión del sistema carcelario para que “se mantenga el orden y el control” en los centros penales del país, precisó el funcionario del INP a la radio HRN, de Tegucigalpa.
El sistema penitenciario de Honduras está compuesto por una treintena de cárceles y alberga a 18.800 presos, cuando su capacidad máxima es de 8.000, según cifras oficiales.