La delegación de diálogos del Ejército de Liberación Nacional (ELN) afirmó hoy desde La Habana que sigue “adelantando gestiones tendientes a la pronta liberación” de las nueve personas que esa guerrilla ha secuestrado en la última semana en Colombia, entre ellas dos civiles y siete militares y policías.
EFE
“Esperamos que las operaciones del Ejército estatal que están en curso en las zonas donde hemos hecho estas detenciones no coloquen el peligro la vida de los detenidos, y que no tengan el propósito de adelantar un rescate por la fuerza”, señaló el grupo insurgente en un comunicado difundido en sus redes sociales.
El ELN asegura que en las “gestiones humanitarias” conducentes a liberar a los secuestrados durante “operaciones de control de territorio” ha tenido “receptividad por parte de integrantes del Gobierno de (el presidente colombiano, Iván Duque y del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR)”.
“Para adelantar las liberaciones es preciso acordar los protocolos y conformar de común acuerdo una Comisión humanitaria con la ONU, la Iglesia, Garantes y delegados de las dos partes”, agrega la nota.
El ELN secuestró ayer jueves a tres soldados en el este de Colombia cuando se movilizaban en un taxi, que se suman a las seis personas -tres policías, un militar y dos contratistas civiles- capturadas por esa guerrilla en el departamento de Chocó (oeste) el pasado 4 de agosto.
Ese mismo día, la delegación de paz de la guerrilla anunció desde la capital cubana la “pronta liberación” de esos seis secuestrados y pidió cooperación a las Fuerzas Armadas colombianas para garantizar la seguridad de los prisioneros.
El pasado 1 de agosto, el Gobierno saliente de Colombia y el ELN concluyeron en La Habana su sexto ciclo de conversaciones sin lograr su objetivo de concretar un cese el fuego bilateral temporal que garantice el avance del proceso de paz, iniciado hace más de un año.
El nuevo presidente del país, Iván Duque, aseguró esta semana que en los primeros 30 días de su Gobierno evaluará los diálogos de paz con la guerrilla para tomar una decisión al respecto.
“Queremos avanzar pero el pueblo colombiano no tolerará que la violencia sea legitimada como medio de presión al Estado”, subrayó el nuevo mandatario.