Los venezolanos abarrotaron hoy los mercados, las gasolineras y los bancos ante la inminente aplicación de la reconversión monetaria -que se inicia el lunes- y el próximo aumento de la gasolina, medidas que tienen a los ciudadanos en zozobra pues preven que traerán más caos a este país que pasa por una severa crisis.
La angustia se ve además acrecentada en este día pues representa la última jornada en la que los bancos abrirán sus puertas antes de la reconversión que le quitará cinco ceros al bolívar y tomando en cuenta que el lunes fue decretado no laborable por el Gobierno.
Varios billetes de baja denominación saldrán de circulación, incluyendo los del cono monetario anterior al que va a ser sustituido y que aún eran usados en el país y de ahí las largas filas frente a los bancos.
Los supermercados amanecieron abarrotados de consumidores que además deben hacer grandes colas para pagar pues las transacciones con tarjetas de débito o crédito solo soportan un límite que ya fue sobrepasado por la hiperinflación, por lo que los usuarios deben apelar por varios plásticos, si es que cuentan con más de uno.
El aumento de la gasolina, hasta ahora la más barata del mundo, tiene en ascuas a los ciudadanos pues aún no se sabe en cuánto se pagará por el líquido y de ahí que muchos se precipiten a las bombas de combustible para recargar el tanque mientras lo puedan hacer.