Un satélite ruso intentó el año pasado espiar a un satélite franco-italiano de comunicaciones militares, denunció el viernes la ministra de las Fuerzas Armadas francesas, Florence Parly, en un discurso dedicado al sector espacial de defensa.
AFP
En 2017, “cuando Athena-Fidus continuaba tranquilamente su rotación sobre la tierra, un satélite se acercó a él, de cerca, de demasiado cerca“, relató la ministra en visita al Centro Nacional de Estudios Espaciales en Toulouse (suroeste).
“Tan cerca estuvo que podríamos haber creído que intentaba captar nuestras comunicaciones”, agregó.
“Intentar escuchar a sus vecinos, no sólo es hostil. Eso se llama un acto de espionaje”, añadió.
“Ese satélite con grandes orejas se llama Luch-Olymp, se trata de un satélite ruso bien conocido pero un poco… indiscreto”, agregó.
“Lo vimos llegar y tomamos las medidas que se imponían. Lo vigilamos atentamente, observamos incluso que los meses siguientes maniobraba activamente alrededor de otros objetivos, pero mañana, ¿quién dice que no se acercará a uno de nuestros satélites?”, interrogó.
Estados Unidos denunció recientemente “el comportamiento muy anormal” de un “objeto espacial” desplegado por Rusia en octubre de 2017.
“Sí, estamos en peligro, nuestras comunicaciones, nuestras maniobras militares (…) están en peligro si no reaccionamos”, advirtió la ministra.
También subrayó que “otras potencias espaciales desplegan en órbita objetos intrigantes, experimentan capacidades potencialmente ofensivas, conducen maniobras que no dejan dudas sobre su misión agresiva”.