Una profesora universitaria hizo pública este domingo una acusación contra el candidato de Donald Trump para integrar la Corte Suprema de Estados Unidos de agredirla sexualmente en la década de 1980, lo que provocó llamados de la oposición para posponer el voto de nominación.
Christine Blasey Ford, profesora de la Universidad de Palo Alto, acusa a Brett Kavanaugh, de 53 años, de haberla agredido sexualmente durante una fiesta hace casi cuatro décadas, cuando este último, entonces estudiante de un liceo a las afueras de Washington, estaba “completamente ebrio”.
Ford había detallado las acusaciones contra Brett Kavanaugh en cartas confidenciales a su congresista y luego a la senadora por California Diane Feinstein, la demócrata de mayor rango en el Comité Judicial de la cámara alta.
Ahora, dijo al Washington Post en una entrevista difundida el domingo, había decidido salir a la luz pública porque sentía que su “responsabilidad cívica” estaba “superando” su “angustia y terror por las represalias” después de que los detalles básicos de la historia surgieran en los medios estadounidenses la semana pasada.
Kavanaugh había emitido una declaración el viernes negando el incidente: “niego de manera categórica e inequívoca esta acusación. No hice esto en la escuela secundaria ni en ningún otro momento”.
Ford, que está registrada como demócrata, le dijo al diario que el hecho sucedió un verano de principios de la década de 1980, cuando Kavanaugh y un amigo, que estaban “tambaleándose ebrios”, la arrinconaron en una habitación durante una fiesta de adolescentes en una casa en el condado de Montgomery, un suburbio de Washington.
Kavanaugh la inmovilizó en una cama mientras su amigo observaba, dijo la mujer, y luego la tanteó mientras intentaba quitarle el traje de baño de una pieza y la ropa que tenía encima.
Cuando ella intentó gritar pidiendo ayuda, Kavanaugh puso su mano sobre su boca.
“Pensé que podría matarme sin querer”, dijo Ford, que ahora tiene 51 años y vive en el norte de California. “Estaba tratando de atacarme y quitarme la ropa”, agregó.
Dijo que finalmente pudo escapar cuando otro de los compañeros de clase de Kavanaugh en su prestigiosa escuela privada, Mark Judge, saltó encima de ellos. En ese momento los tres cayeron al piso y la mujer pudo salir de la habitación, primero, para encerrarse brevemente en un baño antes de huir de la casa.
Añadió que no le había contado a nadie sobre el ataque hasta 2012, cuando lo mencionó durante una terapia para parejas con su esposo.
Las notas del terapeuta de la época, vistas por el Washington Post, no mencionan a Kavanaugh por su nombre, pero se hacen eco del reclamo describiendo un ataque de estudiantes “de una escuela elitista de varones” que se convirtieron en “miembros muy respetados y de alto rango en la sociedad de Washington”.
Las notas subsiguientes describen el ataque como un “intento de violación”.
– “Un insulto a las mujeres” –
La senadora demócrata Dianne Feinstein dijo el domingo: “Desde el principio, he creído que estas acusaciones eran extremadamente serias y pesaban en gran medida sobre el carácter del juez Kavanaugh”.
“Apoyo la decisión de la señora Ford de compartir su historia, y ahora que lo ha hecho, está en manos del FBI llevar a cabo una investigación”, agregó Feinstein. “Esto debería suceder antes de que el Senado avance (en la nominación de) este candidato”, agregó.
La votación en el Comité Judicial está prevista para el 20 de septiembre, y de ser confirmado, pasaría al pleno del Senado.
“Durante demasiado tiempo, cuando las mujeres han hecho acusaciones graves de abuso, han sido ignoradas. Eso no puede suceder en este caso”, dijo Chuck Schumer, líder de los demócratas en el Senado, en un comunicado.
“Forjar una votación ahora sería un insulto a las mujeres de América y la integridad de la Corte Suprema”, añadió.
AFP