El Gobierno luso y el presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, expresaron su preocupación por la detención de más de tres decenas de gerentes de dos cadenas de supermercados portugueses en Venezuela. EFE
En un comunicado, el Ministerio de Exteriores luso explicó que llamó al embajador de Venezuela en Portugal, Lucas Rincón Romero, para transmitirle la “gran preocupación” del Gobierno por los detenidos, entre los que se incluyen varios portugueses y descendientes de ciudadanos lusos.
En la reunión se recordó “la valiosa contribución que la significativa comunidad portuguesa y lusodescendiente en Venezuela dio al desarrollo del tejido empresarial del país” y “la resiliencia que han demostrado frente a las dificultades de la economía venezolana”.
“La comunidad portuguesa en Venezuela, como tantas otras en el mundo, está profundamente integrada y es conocida por su capacidad de trabajo y por el respeto por el orden jurídico del país”, recoge el comunicado, en el que se añade que la preocupación también fue transmitida al ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza.
Por su parte, el jefe del Estado luso publicó una nota en la página web de Presidencia en la que manifestó “mucha preocupación” por las detenciones de portugueses y descendientes, y aseguró que acompaña “la posición y las diligencias promovidas por el Gobierno portugués”.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó el pasado miércoles de que más de tres decenas de gerentes de supermercados habían sido detenidos por violar la ley, acusados de esconder productos a los clientes y alterar los precios.
Venezuela alberga la segunda mayor comunidad de portugueses en Latinoamérica (unos 400.000), sólo por detrás de Brasil, muchos de los cuales emigraron entre las décadas de 1940 y 1980.
La grave crisis que vive el país caribeño ha provocado que descendientes de esos emigrantes decidieran iniciar el regreso a Portugal.