Mick Schumacher, el hijo de la leyenda de la Fórmula 1 Michael Schumacher, puede proclamarse este fin de semana a los 19 años campeón de Europa de Fórmula 3, una competición que podría servirle como trampolín para la Fórmula 1.
El sábado y el domingo en Hockenheim, ‘Mick’ tiene la oportunidad de ser campeón en casa. Tras 9 citas (tres carreras cada una), tiene 49 puntos de ventaja sobre su primer perseguidor, el británico Dan Tickum. El reparto de puntos es el mismo que en la Fórmula 1 (25 al vencedor, 18 al segundo).
Un título o una segunda plaza en F3 da derecho a una ‘Super Licencia FIA’, indispensable para correr en Fórmula 1.
“Quiero avanzar paso a paso y tomo las carreras una a una”, señaló el joven Schumacher, que corre para la escudería Prema Theodore Racing Team. “Mi nombre abre puertas, pero cada vez hay que demostrar que vales”, añadió.
En este final de temporada el piloto parece intocable, logrando cinco victorias consecutivas y una segunda plaza en las seis últimas carreras.
Su padre, Michael, siete veces campeón del mundo de Fórmula 1, no ha aparecido en público desde su accidente de esquí en diciembre de 2013, en el que resultó herido de gravedad en la cabeza.