La red social Twitter publicó el miércoles datos sobre 4.541 cuentas ligadas a Rusia e Irán, incluyendo los nombres y la información que diseminaban, que eran utilizadas para influir en países extranjeros y llevar adelante las agendas políticas de Moscú y Teherán.
Infobae
Del total, 3.841 cuentas están vinculadas a la Agencia de Investigación en Internet (IRA), una empresa rusa cercana al gobierno de Vladimir Putin, y las restantes 700 provienen de Irán.
Se incluyen unos 10 millones de tuits producidos por estas cuentas desde el 2009 en adelante, con su correspondiente contenido multimedia de más de dos millones de fotos, GIFs, videos y transmisiones de Periscope lanzadas por los presuntos “trolls”, según indica Wire.
Las fuerzas de seguridad de Estados Unidos y Europa han estado investigando el accionar de agentes rusos e iraníes en redes sociales, especialmente Twitter y Facebook, desde hace tiempo.
Han estudiado numerosas campañas de difusión de noticias falsas e información de distinto tipo con fines políticos, por ejemplo intentando influenciar en una elección o cambiando la opinión pública sobre diferentes políticas o países.
Pero esta es la primera vez que un caudal tan extenso de datos se pone a disposición del público.
Atlantic Council, un think tank estadounidense que tuvo acceso previo a la información develada por Twitter, lanzó sus primeras conclusiones en un primer informe: “Muchos de los tuits tuvieron poco o nada de impacto, y quedaron tapados por Twitter”. Pero las operaciones continuaron.
Entre 2014 y 205 los “trolls” rusos se encargaron principalmente de asuntos internos o regionales, especialmente de la guerra civil en Ucrania potenciada por Moscú, indicó el Atlantic Council. Al respecto se registraron 800.000 tuits en ruso sobre el tema.
Ese mismo año hubo también 400.000 tuits en inglés, que luego se redujeron en cantidad yvolvieron expandirse en 2017, en medio de una investigación de Estados Unidos por la injerencia rusa en sus elecciones de 2016.
Además de las operaciones durante los comicios presidenciales estadounidenses, los datos provistos por Twitter muestran que los “trolls” rusos también se dedicaron a polarizar comunidades en Europa y Estados Unidos.
Por ejemplo, desperdigando consignas islamofóbicas luego de los ataques terroristas islámicos en Bruselas, impulsando el Brexit en el Reino Unido o filtrando información del presidente francés Emmanuel Macron antes de su elección.
En otro caso de alto impacto, se comprobó que el día antes de que el vuelo MH17 de Malaysia Airlines fuera derribado en 2014 por un misil ruso mientras sobrevolaba Ucrania, las cuentas investigadas lanzaron 19.000 tuits. Luego del incidente, en el que murieron 283 personas, tuitearon 57.000, todos ellos promoviendo la tesis de que había sido abatido por el gobierno ucraniano.
Todas las investigaciones internacionales han concluido que el avión fue destruido por un misil ruso disparado por rebeldes prorussos en Ucrania.
Pero esto es sólo el comienzo y es de esperar que numerosos investigadores comiencen a estudiar la cuestión, ya que el caudal de información es casi inabarcable: 296 gigabites de contenidos audiovisuales de los “trolls” rusos, 65,7 gb de los iraníes.