Ramón Guillermo Aveledo: La gente quiere una causa por la cual vivir

Ramón Guillermo Aveledo: La gente quiere una causa por la cual vivir

Ramón Guillermo Aveledo. Foto: Archivo

 

En el marco de la instalación del Foro “Retos y desafíos de la Democracia Cristiana en Venezuela”, en homenaje a Arístides Calvani, hombre especial en la formación de la escuela humanista cristiana en Venezuela y en América Latina, los ponentes manifestaron que con este encuentro están reafirmando los valores Social Cristianos y refrescando las ideas que dieron origen al nacimiento de esta ideología.

Nota de Prensa





Este encuentro –en su primera fase- contó con la participación de Román Duque Corredor, Nelson Chitty La Roche, Ramón Guillermo Aveledo, César Pérez Vivas y Luis Ignacio Planas, quienes se enfocaron en dimensionar la dirección espiritual que el país necesita en este momento, como un elemento que mueva la fibra nacional para mantener viva la esperanza en la Venezuela en que desea y quiere vivir la mayoría de los ciudadanos.

“Esas ideas que defendemos como el bien común, la solidaridad, el respeto a la vida, a los derechos humanos, la democracia, la familia, son los temas que queremos colocar sobre la mesa. La discusión política no se puede seguir centrando en un quítate tú, pa’ ponerme yo, sino en ideas, en propuestas que ayuden a resolver los gravísimos problemas que tenemos los venezolanos”. Señaló Luis Ignacio Planas, dirigente Social Cristiano.

Consideró que la Democracia Cristiana tiene mucho que aportar en la actual situación en la que se encuentra el país. “Hasta ahora ha sido una voz que no ha actuado con la potencia que la circunstancia amerita; por eso creemos importante que nuestros pasos sirvan para decirle al país que en ese camino equivocado que nos impone el gobierno de (Nicolás) Maduro, existen propuestas distintas, una alternativa con las cuales podemos lograr la solución a los problemas de los venezolanos”.

En su ponencia señaló que tanto el gobierno de Maduro y –el anterior- del difunto Hugo Chávez, han sido una máquina de generar pobreza. Por ello propone una economía que aspira ser más humana, y como prioridad como prioridad debe imperar la superación de la pobreza que sigue siendo un problema de la justicia social.

Sin desarrollo no hay paz

En su ponencia, Ramón Guillermo Aveledo, presidente Instituto Fermín Toro, habló sobre “Los retos de la política en la actualidad venezolana”, donde expuso que los Social Cristianos no hablan de los retos de cualquier política, sino de una política humanista cristiana. “La nuestra es una lucha por el poder para ponerlo al servicio de la gente. El bien común es el desarrollo y sin desarrollo no hay paz”.

A su juicio, el reto es fortalecer la democracia y recuperarla donde no la haya. “Aquí estamos dispuestos a recuperarla aprovechando cada rendijita de libertades que se nos presente, sin ignorar la verdadera situación que vivimos en un país en el cual no hay democracia; el reto indispensable es la unidad, sin unidad, la credibilidad interna y externa de la alternativa de cambio en Venezuela es mucho menor. La unidad tiene que ser en torno a unos proyectos comunes, con la mayor apertura y desprendimiento. El reto final es el de la política recupere el sentido de futuro, de esperanza, la gente no va a entregar la vida con un cuento viejo, la gente esta dispuesta hacer todo si es motivada por una esperanza. No hace falta una causa por la cual morir, la gente lo que quiere es una causa por la cual vivir”.

Extremos ideológicos

Por su parte, el ex parlamentario y ex gobernador del estado Táchira, César Pérez Vivas, habló de los extremos ideológicos y la polarización en la política contemporánea venezolana.

Hizo la comparación de lo que se vivió en Venezuela durante la segunda mitad del siglo XX, bajo un ambiente pluralista de libre desarrollo de las ideas, y a comienzo del siglo XXI una política que busca imponer desde el Estado una idea, una doctrina, una sola forma de concebir al hombre y a la sociedad.

“En el empeño de imponer una ideología radical, la implantación de la democracia ha producido esa polarización sin precedente en los recientes tiempos de nuestro país, y los riesgos de esa ideología impacta directamente a la cultura, a la vida política y debe convocarnos a todos nosotros a una acción educativa, pedagógica, política que permita ofrecerle a la sociedad la ruta de alternativas de orden estrictamente democrática por la cual se pueda soñar y construir una Venezuela posible”.

Aseveró que frente al empeño de utilizar todo el aparato del Estado, incluida la Fuerza Armada Nacional como un instrumento de propaganda de una ideología que se impone a la sociedad, tiene entonces la formulación de otro polo que busca responder a la hegemonía que se busca aplicar desde el gobierno con paradigmas alternativos.

Invitó a los venezolanos a recapacitar y entender la obligación de ofrecerle al país una esperanza y una oportunidad para superar la crisis social, política y económica. “Aquí estamos recordando esos principios que nosotros hemos llevado adelante de la promoción de la democracia, de la libertad, de la equidad, de promover una economía diferente, una economía moderna de mercado que nos saque de la ruina en la que estamos inmersos; es una convocatoria a toda la sociedad y actores políticos democráticos, para que integremos con fuerza el camino para encontrar una solución que ofrezca un cambio político a Venezuela”. Concluyó Pérez Vivas.