El presidente colombiano, Iván Duque, recorrió este jueves la Feria Internacional de Arte de Bogotá (ARTBO), en donde aseguró que uno de los propósitos de su Gobierno es lograr que la cultura sea una herramienta para combatir la violencia y potenciar la economía naranja.
EFE
“Una de las metas para estos cuatro años es que el poder que tiene la cultura para unir a los colombianos sea el gran antídoto contra la violencia”, dijo Duque al asistir a la edición 14 del evento.
ARTBO, una de las vitrinas más importantes de América Latina, se inauguró anoche con la participación de 70 galerías de 19 países y, a juicio de la Cámara de Comercio de Bogotá, organizadora de la feria, es un espacio que demuestra que cultura es sinónimo de desarrollo y un vehículo para integrar a los países.
Esta actividad, agregó el mandatario, “permite que el talento de nuestros artistas y su creatividad sean reconocidos, valorados, que se proyecten y tengan el elemento adicional del comercio de sus obras”. Esta semana, además de ARTBO, la capital colombiana es sede de al menos siete encuentros del sector como la Feria de Arte Barcú, la Feria Odeón y la Feria del Millón.
Estos encuentros, destacó el director ejecutivo de la agencia de promoción Invest in Bogota, Juan Gabriel Pérez, se constituyen en “los principales exponentes de una industria que es cada vez más relevante para la economía nacional”.
De hecho, recordó Pérez, “durante 2017 Colombia fue el segundo país de la región que más proyectos de inversión extranjera recibió en el sector de las industrias creativas digitales, con Bogotá como principal destino de dichas inversiones”.
Por lo anterior, Duque aseveró que su presencia en ARTBO este jueves tiene como fin recordar el compromiso de su Gobierno con la cultura a través de la asignación de más recursos. Además, reiteró, “queremos hacer de la economía naranja uno de los motores del desarrollo del país”.
Para ello, el presidente ha dicho que espera que la economía naranja, que hoy representa el 3,4 % del PIB, llegue a superar el nivel de países desarrollados como el Reino Unido o a Estados Unidos, en donde alcanza el 7 u 8 %.