“Las navidades venezolanas ya no son las mismas que pudieron haber sido en años anteriores. Este año tenemos menos producto, menos abastecimiento, menos calidad en los productos que estamos ofreciendo y sobre todo tenemos un usuario con muy poca capacidad de compra”, así lo señaló la presidenta de Consecomercio, María Carolina Uzcategui. También advirtió que si el Ejecutivo Nacional no toma medidas diferentes para atacar el problema inflacionario en Venezuela y no entabla conversaciones con los sectores comerciales, la situación empeorará.
LaPatillla.Com
Informó que este año se ha percibido el cierre de 40% de los comercios que había en relación al año pasado 2017 y denunció que el sector en general sufre de constantes caídas sostenidas debido a la crisis económica venezolana.
Uzcategui afirmó que la institución que preside maneja “cifras realmente trágicas para lo que debería ser una economía que requiere crecimiento en lugar de restricciones”. Mencionó que la economía nacional “ya superó 50% de decrecimiento” y que continuará disminuyendo si el gobierno no toma medidas diferentes en esta materia.
Aseguró que todas las ramas del comercio se ven afectados por la crisis. En el sector alimenticio, por ejemplo, existe una caída de consumo cerca de 60%, mientras que los sectores de ropa y calzado que es “lo que tradicionalmente venían siendo las mayores compras de esta temporada” presenta una declive superior a 80%. Por otra parte, las importaciones del sector privado para esta temporada disminuyeron 90%.
Asegura que la situación de los comercios se ha agravado últimamente “sobre todo por las medidas (económicas) tomadas el último trimestre del año”, debido a que la “terrible hiperinflación” hace que “cualquier incremento salarial que se haga se vuelve sal y agua mucho antes de ser anunciado”. Y a esto se le suma “la reforma tributaria, el hecho de tener que declarar semanalmente impuestos sobre una resta que no existe, el acoso, la persecución y el encarcelamiento”, lo que forma parte de un cóctel letal que obliga a muchos negocio a cerrar sus puertas o a estar “en un proceso de reinvención constante”.