Una aeronave de la NASA llegó este lunes a la órbita de Bennu, un asteroide primitivo compuesto de las moléculas que dieron origen a la vida en la Tierra y que podría aportar nueva información sobre la historia del Sistema Solar.
EFE
“Bennu está cubierto de material carbónico y principios orgánicos, las bases constructoras de la vida”, explicó la científica adjunta del proyecto Amy Simon durante la retransmisión de la llegada de la aeronave.
La misión, apodada OSIRIS-REx, tiene como uno de sus objetivos principales la extracción de una muestra de este asteroide para enviarla a la Tierra, señaló la Agencia Espacial Estadounidense.
Para hacer llegar a la Tierra esa pieza, la aeronave cuenta con un dispositivo que propulsará una cápsula con la muestra en su interior y que deberá cruzar la atmósfera de nuevo hasta aterrizar entre los estados de California y Nevada (EEUU). “Es algo muy emocionante y que nunca antes hemos hecho”, afirmó el científico instrumental de OSIRIS-REx, Dennis Reuter.
Los científicos de la NASA consideran que este asteroide primitivo se formó en una colisión cósmica contra un protoplaneta hace aproximadamente mil millones de años.
La aeronave acompañará a partir de ahora a Bennu como si fuera su satélite para así conocer cómo funciona el movimiento de los asteroides que viajan por el Sistema Solar sin una onda gravitatoria definida.
Después, en 2020, extraerá la muestra, que no llegará a la Tierra hasta 2023, calculó la directora de aeronaves de esta misión, Sandy Freund. “Después de dos años de viaje y más de una década de planificación y trabajo estoy aquí. Pero la llegada es solo el principio”, publicó en Twitter el perfil de la misión en su cuenta oficial @OSIRISREx.
Los ingenieros y técnicos han seguido esta fase crítica del proyecto desde las oficinas de control Lockheed Martin, en el estado de Colorado. El responsable de la iniciativa, Javier Cerna, dio por concluida la llegada de la aeronave en torno a las 12.00 local del Este de EEUU (17.00 hora GMT) con exitoso resultado.