Los cinco marines estadounidenses desaparecidos tras la colisión, la semana pasada, de dos aviones militares estadounidenses frente a las costas japonesas fueron dados por muertos, elevando a seis el balance del accidente, anunció este martes el ejército estadounidense.
Tras varios días de búsquedas infructuosas, el cuerpo de Marines decidió poner fin a las amplias operaciones de rescate, según un comunicado. Solo un marine fue rescatado con vida.
“Se hicieron todos los esfuerzos posibles para recuperar a nuestra tripulación”, declaró el teniente general Eric Smith, de la 3ª fuerza expedicionaria de los Marines, quien saludó la movilización “increíble de las fuerzas estadounidenses, japonesas y australianas”.
El accidente se produjo el 6 de diciembre a las 2H00 locales (17H00 GMT del miércoles) cuando los aviones “llevaban a cabo entrenamientos programados regularmente” a unos 100 km del cabo Muroto, en la isla de Shikoku (sudoeste).
Los dos aparatos del cuerpo de Marines, un caza F/A-18 con dos personas a bordo y un avión de avituallamiento KC-130 con cinco ocupantes, colisionaron en circunstancias aún no determinadas.
“No está confirmado que el accidente se produjera durante una operación de avituallamiento en vuelo”, precisó el comunicado.
Las Fuerzas Armadas estadounidenses tienen unos 50.000 efectivos en territorio japonés, alrededor de la mitad de ellos en el archipiélago de Okinawa, y los accidentes no son infrecuentes. AFP