La ciudad de San Cristóbal se encuentra inundada por huecos en la mayoría de sus calles, carreras y avenidas, prácticamente ninguna comunidad se escapa de tales daños, los cuales producen deterioro en los vehículos que transitan por ellas, pareciese incongruente cuando se dice que Venezuela es una nación petrolera pero los gobernantes, no cumplen con sus obligaciones constitucionales en torno a la vialidad, alegando entre otros aspectos la falta de presupuesto.
Por Ricardo W. Durán/ LaNación
Es el caso de la avenida Rotaría, específicamente en el tramo entre un reconocido hotel y la residencia Serranía, que por el bote constante de agua que sufrió durante un largo tiempo este tramo de carretera, además producto de las movilizaciones de tierras que se realizan desde hace años para la construcción de un centro comercial, se generó una cantidad de huecos de gran tamaño que deterioran el tren delantero y dañan los cauchos de los automóviles que transitan por el lugar y así lo dijeron quienes por allí transitan para la sección #YoreportoaLaNación.
Se han registrado diversos accidentes de carros que transitaban por esta avenida, ya que los mismos se encuentran con los cráteres que llevan largo tiempo en el lugar y por si fuese poco tampoco existe un semáforo que regule el tránsito en el cruce que conecta la avenida Rotaría hacía la urbanización Los Criollitos, aparato regulador del tránsito que no ha sido instalado por la alcaldía capitalina.
Un país petrolero con calles rotas
Los vecinos reiteran que ni el gobierno nacional, gobernaciones o alcaldías han cumplido con sus obligaciones constitucionales en torno a la vialidad, cada día se empeora la calidad de las carretas produciendo daños al parque automotor que transitan por ellas, aun cuando Venezuela tiene las reservas más grandes de petróleo en el mundo, es difícil encontrar una vía con asfalto nuevo.
En el Táchira, Caimta es la empresa encargada de producir la cantidad suficiente de asfalto para que los alcaldes iniciaran la reparación de carreteras, aunque con el paso de los años los burgomaestres denuncian que la misma se encuentra paralizada en la mayoría del tiempo y aún cuando está produciendo su capacidad no es suficiente para saldar el deterioro de calles, allí es cuando los usuarios preguntan, ¿Si somos un país petrolero, porque no lo vemos reflejado en la vialidad?
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