Vapear para dejar de fumar

Vapear para dejar de fumar

 

 







Como una salida para los problemas de salud que produce el consumo del cigarro tradicional, la industria tabacalera volcó sus esfuerzos en la creación de un producto que simulara la misma acción de fumar, pero con menos efectos contraproducentes para el cuerpo.

De esta forma nace el cigarro electrónico, que desde su lanzamiento al mercado ha tenido una serie de cambios positivos terminando de posicionarlo como un artículo de moda muy usado entre quienes desean dejar de fumar.

Cambios graduales

Los primeros modelos que se crearon de estos cigarros electrónicos eran muy sencillos. Eran pequeños cilindros que calentaban un agua saborizada y emanan vapor por una boquilla.

En la actualidad la simplicidad es cosa del pasado, más allá de los colores, materiales de su fabricación y tamaño, la tecnología también se apoderó de estos cigarros, o vapers como se conocen comercialmente, y ya hay modelos que integran pantallas LCD que muestran toda la información del equipo, como temperatura del líquido, el número de caladas que se han dado, cuanto queda, entre otras.

La presencia de gadgets en estos artículos ofrece un mundo completo de opciones que brindan una experiencia diferente para cada cliente.

Por ejemplo, es posible potenciar o minimizar el sabor a los aromas que se usan en el vaper gracias a las mejoras logradas en los cigarros electrónicos.

Anteriormente usaban pilas, ahora son recargables mediante un puerto USB, por lo que no existe ninguna limitación desde ese punto de vista para su uso.

Su estructura es la siguiente:

  • Depósito para almacenar el líquido que generará el vapor
  • Atomizador que calienta el líquido y crea el vapor
  • Sensor para accionar el atomizador las veces que se inhale
  • Batería
  • Puerto USB para cargar

Para todos los gustos

Gracias a la evolución que ha tenido este artículo, se pueden satisfacer los gustos más exigentes, desde el tamaño, capacidad de aromatizador que pueden almacenar, diversidad de atomizadores y sobre todo el amplio abanico de líquidos que hay disponibles para vapear

Este último es uno de los aspectos donde se han presentado mayores cambios. En primera instancia solo había aromas comunes, ahora es fácil encontrar sabores hasta de limón.

Inclusive es posible combinar el diseño del vaper con el estilo y la personalidad de su dueño. Su diseño puede ser muy discreto y sofisticado o por el contrario puede estar lleno de colores ser grandes y llamativo.

La clave es conocer lo que hay en el mercado y escoger el modelo que mejor se adapte. Para ello un consejo útil es indagar en internet sobre cigarros electrónicos para poder tomar una buena decisión en el momento de comprar, una muy visitada es Vapo.es. En la tienda online de Vapo se pueden encontrar hasta los últimos diseños que llevan incorporados una pantalla de LED hasta líquidos con los más variados sabores.

La diversidad también se puede apreciar en los precios de este artículo que puede ir desde los 12 euros en su presentación más sencilla, hasta los 70 y 80 euros en sus versiones más sofisticadas.

Una salida saludable

Desde su llegada, los cigarros electrónicos se han posicionado como una alternativa saludable ante el consumo de cigarros que durante años han ocasionado miles de muertes alrededor del mundo. Por eso quienes buscan eliminar este desagradable hábito de sus vidas han adoptado los vapers como una nueva rutina.

Al no contener nicotina, los vapers no producen adicción y los subyacentes problemas pulmonares y en la garganta propios del cigarro. Esto permite que los fumadores puedan ir dejando su apego a la nicotina de manera gradual hasta eliminar completamente la necesidad de su sistema.

Algunos expertos aseguran que los cigarros electrónicos si son una ayuda para dejar de fumar, aunque reconocen que estos dispositivos ralentizan la ruptura con el cigarrillo desde el punto de vista psicológico debido a las similitudes que existe en el proceso “de fumar” con un vaper.

Por eso recomiendan que se le explique plenamente a la persona sobre los porcentajes de efectividad de este accesorio en el proceso de dejar de fumar.

Beneficios

  • Aún no se conocen casos registrados de efectos en la salud por el uso prolongado de los cigarros electrónicos porque no contienen los más de 4.000 productos químicos que tienen los pitillos tradicionales.
  • Estudios clínicos han demostrado que son efectivos en la disminución de los síntomas que ocasiona el síndrome de abstinencia cuando se inicia el proceso de dejar de fumar.
  • No hay combustión y la persona tampoco traga humo.
  • No hay riesgo de sufrir los efectos secundarios estéticos como la decoloración de las uñas, coloración amarillenta de los dientes o que los labios se pongan morados.
  • Debido a que el líquido que se usa para generar el vapor puede ser diversos aromas y sabores, el olor que despide no es desagradable.
  • No genera contaminación.
  • Su uso está permitido en espacios cerrados, donde por leyes sanitarias se ha prohibido el uso del cigarro debido a las implicaciones para la salud de quienes rodean al fumador, conocidos como fumadores pasivos.