La demolición del puente Morandi que se derrumbó el año pasado y mató a 43 personas en Génova entró este sábado en su fase más activa con el descenso de un primer segmento que debería tocar tierra en las próximas horas.
Se necesitó toda la jornada del viernes y parte de la noche para cortar un segmento de 36 metros de largo, 18 metros de ancho y casi mil toneladas de peso, que ahora hay que ubicar 48 metros más abajo.
Los responsables de la obra explicaron que el segmento bajará a una velocidad de unos cinco metros por hora.
Una vez en el suelo se utilizará como contrapeso para desmantelar otras porciones del puente. Luego se destruirán los pilares con dinamita.
El desmantelamiento completo del puente debería durar al menos seis meses, con 60 personas trabajando día y noche para cumplir con el calendario de reconstrucción.
El gobierno prometió inaugurar en abril de 2020 un nuevo puente de acero y cemento diseñado por el arquitecto italiano Renzo Piano.
El 14 de agosto de 2018, una parte del puente Morandi —el nombre del arquitecto que lo diseño en los años 1960— se derrumbó, provocando la caída de vehículos y pasajeros. AFP