Laurie Holt, una mujer que batalló durante casi dos años para conseguir la liberación de su hijo, preso en Venezuela, falleció el domingo a los 50 años de edad, menos de un año después de que su hijo regresase a Estados Unidos.
Holt murió inesperadamente en su casa de Riverton, un suburbio de Salt Lake City, según la ex representante Mia Love. Su esposo Jason Holt la fue a despertar para ir a la iglesia a eso de las 11 de la mañana y la encontró inconsciente, indicó Love.
No se conoce por ahora la causa de la muerte. Holt no tenía ninguna enfermedad, según Love, quien se hizo amiga de Holt cuando ambas trabajaron para conseguir la liberación del hijo de Holt, Josh Holt.
Josh regresó a Estados Unidos con su esposa venezolana, Thamara Caleno, en mayo del 2018, tras ser apresado en junio del 2016 acusado de tenencia de armas, cargos que los Holt y políticos estadounidenses dicen fueron inventados.
Holt había viajado a Venezuela en junio del 2016 para casarse con Caleno, a quien conoció en la internet cuando buscaba algún mormón que lo ayudase a mejorar su español.
Pensaba pasar varios meses en Caracas con su nueva esposa y las dos hijas de ella mientras gestionaba visas para que pudiesen irse con él a Estados Unidos.
La pareja, sin embargo, fue arrestada y acusada de almacenar armas. Las autoridades venezolanas dijeron que el caso podía estar vinculado con esfuerzos no especificados para socavar el gobierno de Nicolás Maduro en medio de un período de agitación económica y política.
Laurie Holt negó tajantemente las acusaciones en nombre de su hijo y trabajó por su liberación, organizando actos, recaudando fondos y dando entrevistas.
Josh Holt y Caleno estuvieron detenidos en condiciones muy duras, según la madre del estadounidense, quien dijo que su hijo tuvo varios problemas de salud en prisión, incluidos cálculos renales y trastornos respiratorios.
La liberación se produjo después de una serie de contactos secretos entre un asistente del senador de Tennessee Bob Corker, presidente de la comisión de relaciones exteriores de la cámara alta, y allegados a Maduro.
El presidente Donald Trump recibió a los Holt en la Casa Blanca para festejar la liberación. El senador Orrin Hatch retuiteó el domingo un video filmado ese día que muestra el emotivo reencuentro entre la mujer y su hijo.
A Holt le sobreviven su esposo y cuatro hijos adultos.
“Tenía un corazón enorme. Nos hará mucha falta”, dijo la familia en un comunicado.
Love dijo que la detención del hijo fue un golpe emocional y financiero muy duro para la familia, que se endeudó mucho para pagar los abogados que contrataron para pelear por la liberación de Josh. Love lanzó una campaña online ( fundraising ) para recaudar fondos para el funeral.
Love señaló que Holt estaba feliz de tener de nuevo a su hijo y que no veía la hora de que Thamara Calenos diese a luz en agosto.
“Me parece muy triste que haya podido disfrutar de su familia y su hijo solo unos pocos meses”, declaró Love. “Nos hará mucha falta”.
AP