ABC de la política: Venezuela en la incertidumbre sin escenario alentador, por Carlota Salazar Calderón

ABC de la política: Venezuela en la incertidumbre sin escenario alentador, por Carlota Salazar Calderón

Carlota Salazar Calderón @carlotasalazar

Llegamos al punto de muerto de todo o nada. Después de los lamentables hechos de este fin de semana en el intento de pasar ayuda humanitaria, rechazada por quienes detentan el poder en Venezuela. En medio de la desinformación de si entró o no entró, cada bando se le arroga al otro la culpabilidad de los muertos, heridos y conteiner quemados. En efecto, no hay vuelta atrás, los códigos de guerra frontal están activados, con todo el ingrediente de odio, rencor y resentimiento que ello implica. La gente preparada en sus casas esperando a los marines y esperanzados que ellos arreglen el país.

Todo conduce hacia la intervención, los personeros norteamericanos incluidos Trump, países latinoamericanos y en especial la Asamblea Nacional que la está pidiendo a gritos días ha. Como ha sucedido en otras latitudes las intervenciones han producido guerras y guerillas intestinas, basta leer los informes de la ONU que reflejan cómo desde Siria hasta Yemen, y desde la República Democrática del Congo hasta Nigeria, Sudán del Sur y Myanmar los niños son utilizados, mutilados y sometidos a las guerras de otros, violaciones, torturas, enfermedades erradicadas como el ébola…En descargo de quienes la piden es necesario reconocer que Maduro se lo buscó porque eso de amenazar a EEUU, retar a los países vecinos, inhabilitar partidos políticos, vacía de competencias a la Asamblea Nacional, colocar protectores para que los gobernadores o Alcaldes opositores no tengan recursos para trabajar, desmantelar las oficinas públicas, manejar el presupuesto a su antojo, el abuso ventajista del CNE en los procesos electorales, presos políticos sin el debido proceso… tenía en un momento que recibir una respuesta, lamentablemente en ella no van solos, nos llevan a todos.

Lo más delicado es que sabemos cómo comienza una guerra pero no cómo termina y siempre parecen imponderables que no pueden controlar, nadie, ni Trump, ni San Guaidó. Olvídenlo. Esa es mi preocupación.





La escalada de una guerra es tal que surgen grupos de la nada, imponiéndose, direccionados por ¡sabe Dios quien! La guerra aviva el odio, la venganza, la revancha, saca todo lo malo del ser humano y sólo ganan los que hacen negocios con ella.

Esta semana es determinante, el Congreso norteamericano no apoyó una intervención militar, Maduro aceptó la ayuda de Rusia y de la Comunidad Europea, mientras la ONU está en posición de mediador.

Siempre hay tiempo para negociar: primero resolver la dotación de insumos medicinas y equipos médicos en los hospitales, luego la recuperación económica del país, la institucionalidad, el pluralismo político, respeto a la disidencia, libertad de presos políticos y resarcir las violaciones a los derechos humanos, división de poderes públicos (CNE imparcial), estos son los temas para comenzar el desarrollo y el crecimiento del país. Ambas partes ceden, ninguna doblega a la otra, pero que ninguna de las partes quiere sentarse a negociar. Maduro que lo pide de rodillas nadie le cree y la oposición la rechaza de plano ¡que tragedia! Resta entonces: ¿intervención? ¿Maduro? o ¿paralelismo? ¿Cuál es peor?