Las esperanzas de que la Fórmula Uno sea más competitiva esta temporada que en años anteriores tendrán el domingo su primera prueba en el Gran Premio de Australia, donde el pentacampeón Lewis Hamilton y Mercedes buscarán poner fin al optimismo generado en la pretemporada por el desempeño de Ferrari.
Bajo una administración diferente y tras una serie de ensayos positivos en el invierno boreal, Ferrari llegó a Melbourne lleno de entusiasmo por la velocidad de su monoplaza, aumentando las expectativas de que podrá desafiar el dominio de cinco años de Mercedes.
El jefe de la escudería Mercedes, Toto Wolff, cree que la amenaza de Ferrari es muy real.
“El año pasado, tuvimos que darlo absolutamente todo para llegar a la cima. Por lo que hemos aprendido hasta ahora, este año será aún más difícil”, agregó. “A juzgar por las actuaciones en (las pruebas de) Barcelona, parece que tendremos una buena batalla en Melbourne”.
Si Hamilton, ganador de cuatro de los últimos cinco campeonatos, está sintiendo la presión, lo está ocultando muy bien, ya que un día antes de llegar el lunes a Australia, el piloto de 34 años disfrutó del paracaidismo, su nuevo pasatiempo, saltando de un avión sobre el desierto de Qatar.
Tras ganar 11 de las 21 carreras la temporada pasada, otro campeonato de F1 pondría a Hamilton muy cerca del récord de siete títulos de Michael Schumacher, profundizando el debate sobre quién es el mejor piloto de todos los tiempos.
Una mayor presión parece recaer sobre los hombros del alemán Sebastian Vettel, quien ganó solo cinco carreras el año pasado y vio cómo sus posibilidades de ganar el título se evaporaban con una serie de errores en la pista.
El cuatro veces campeón del mundo buscará su tercera victoria consecutiva en la carrera que inaugura la temporada en Albert Park, luego de superar a Hamilton, quien había salido desde la “pole”, el año pasado.
“Siento que Melbourne es el lugar perfecto para comenzar el campeonato”, dijo el alemán de 31 años, que iniciará su quinta temporada en el “Cavallino Rampante”.
“Tengo grandes recuerdos de esta pista”, aseguró.
-Jóvenes promesas-
El campeón mundial del 2007, el finlandés Kimi Raikkonen, dejó Ferrari para irse a Alfa Romeo, equipo anteriormente conocido como Sauber, por lo que el nuevo compañero de Vettel en la grilla será el monegasco Charles Leclerc, quien a los 21 años es el piloto más joven que tiene la escudería italiana desde 1961.
Otro joven que puede dar que hablar es Max Verstappen. El holandés, que a los 17 años se transformó en el piloto más joven en comenzar una carrera en la F1, es ahora a los 21 un experimentado en la grilla que iniciará su quinta temporada en la máxima categoría del automovilismo mundial.
Verstappen será el líder de Red Bull, que también cuenta con el francés Pierre Gasly, de 23 años.
Red Bull, el mejor equipo el año pasado después de Mercedes y Ferrari, tiene ambiciones mayores para esta campaña tras empezar una asociación con Honda como suministrador de sus motores.
“Nuestro optimismo no es infundado”, dijo el consultor de Red Bull Helmut Marko. “Veo que estamos detrás de Ferrari (…) pero por delante de Mercedes”.
El australiano Daniel Ricciardo también espera tener más suerte cuando debute en casa con Renault, su nuevo equipo, luego de que el año pasado sus posibilidades de lograr un podio en Melbourne con Red Bull sufrieron un revés por una penalización de tres lugares en la parrilla de salida por una infracción técnica menor.
También será un fin de semana emocionante para el polaco Robert Kubica, quien volverá a la F1 con Williams ocho años después de sufrir un grave accidente automovilístico en un rally.
Reuters