Las recientes medidas de Estados Unidos contra Cuba, que complican las inversiones extranjeras en la isla y restringen el envío de remesas, buscan “asfixiar” su economía para que el gobierno socialista ceda posiciones, dijo el jueves el canciller Bruno Rodríguez.
“La meta declarada es asfixiar la economía y castigar al pueblo cubano en su conjunto con la finalidad de arrancar concesiones políticas a nuestro gobierno”, aseguró el ministro, en conferencia de prensa.
“A pesar del indudable impacto económico” de esas medidas, “no podrán mover un ápice la firme determinación de resistencia” de Cuba, aseguró.
La administración de Donald Trump pondrá en vigencia el 2 de mayo un fragmento de una ley de 1996 que habilita a los tribunales federales de Estados Unidos a recibir demandas contra empresas extranjeras que gestionan bienes confiscados después de 1959.
Se trata del capítulo III de la Ley Helms-Burton, que ha generado la reacción de socios de Cuba, principalmente europeos, que rechazan la medida y han dicho a Estados Unidos que tienen herramientas para contraatacar.
Según el canciller, Washington busca reforzar el bloqueo que aplica a la isla desde 1962.
Estados Unidos actualizó el miércoles a 219 el número de entidades en Cuba con las que sus ciudadanos tienen prohibido comerciar, la mayoría turísticas y administradas por sociedades entre las fuerzas armadas y compañías extranjeras.
Rodríguez garantizó las inversiones en la isla e indicó que las leyes de Washington no son aplicables en Cuba.
La administración Trump también anunció la semana pasada su decisión de restringir el envío de remesas de cubanos a sus familiares, un ingreso clave para aliviar los magros salarios estatales y que además permitieron el surgimiento de negocios privados.
Rodríguez reconoce un importante impacto en el sector privado, que representa el 13% de la fuerza laboral de una economía esencialmente estatal.
Las autoridades cubanas han admitido que enfrentan desabastecimiento este año, debido a retrasos en el pago a proveedores.
Washington justifica sus acciones debido a la falta de “libertades fundamentales” en la isla, según un tuit de su embajada en La Habana.
También rechaza el respaldo que Cuba otorga a Nicolás Maduro en Venezuela, a quien Trump busca apartar del poder.
Estados Unidos asegura que Cuba mantiene personal militar en Venezuela y le pide que lo retire, acusación que Rodríguez rechaza.
El canciller reiteró su llamado a la comunidad internacional para que intervenga ante la “insensatez e irresponsabilidad” del gobierno de Trump.
AFP