La expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla (2010-2014) afirmó este martes que el régimen “dictatorial” de Venezuela ha provocado una crisis humanitaria de tal magnitud en ese país, que ha causado la mayor diáspora que se conoce en la historia del continente americano.
“De acuerdo a cifras recientes de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), y son cuatro millones los venezolanos que han abandonado su país, sobre todo en los últimos tres años, a causa de un Gobierno dictatorial que ha cercenado los derechos humanos y la causa la debacle de la economía en Venezuela”, afirmó la exgobernante durante una conferencia en Santo Domingo.
Comparó la situación del pueblo venezolano con la crisis que se produce en Siria y se quejó de que, frente a la situación venezolana, la comunidad internacional no aporta el apoyo que se requiere.
Aunque valoró el apoyo que han dado a los emigrantes venezolanos países cercanos como Colombia, Brasil, Perú y Ecuador, advirtió de que estas naciones “ya no aguantan más” la presión de tan elevada migración procedente de Venezuela.
“La situación en Cúcuta, en la frontera de Colombia y Venezuela, es dramática (…) en estos días estuve en Washington conversando con los embajadores de Venezuela y Colombia y este último me dijo que su país está invirtiendo el 4 % de su PIB (producto interno bruto) en ayuda para los venezolanos”, afirmó Chinchilla.
Sin embargo, aseguró que América Latina tiene la obligación, por razones humanitarias, de acoger a los venezolanos que huyen de la situación de crisis de su país, siempre haciéndolo de manera ordenada y respetando los derechos humanos.
Por otra parte, Chinchilla, quien dictó la conferencia “Política migratoria integral: Una experiencia desde Costa Rica”, dijo que en la región también existen procesos puntuales en relación con los emigrantes, y citó los casos de República Dominicana y Haití, así como el de Costa Rica y Nicaragua.
A su juicio, República Dominicana está en la “dirección correcta” en materia migratoria y destacó que el país caribeño está trabajando “con seriedad” en ese sentido, y que tiene consigo los “instrumentos necesarios” para tratar de sacar el mejor provecho de los flujos migratorios.
Asimismo, que a raíz de la situación de crisis que atravesó Nicaragua el año pasado, muchos ciudadanos de este último país migraron a Costa Rica, donde surgió un movimiento “populista y xenófobo” contra estos, que fue frenado por la asociación de “todos los expresidentes” costarricenses, “quienes iniciamos la campaña ‘Somos Hermanos'”.
En la actividad también habló el embajador de la Unión Europea en República Dominicana, Gianluca Grippa, quien aseguró que la UE ha destinado más de 4.000 millones de euros en los últimos años en ayuda migratoria.
Destacó que a partir de 2015, cuando miles de migrantes llegaron a las fronteras europeas, el continente adoptó “cambios profundos” en sus fronteras, que ha generado una mejor gestión del tema en todos sus aspectos.
Grippa dijo que la UE seguirá ofreciendo refugio a quienes lo necesiten, al tiempo de recordar que una migración legal ordenada es la “principal vía” para entrar a los países de la comunidad europea.
La conferencia que dictó Chinchilla fue organizada por el Instituto Nacional de Migración de República Dominicana (INMRD), y contó con el apoyo del World Leadership Alliance-Club de Madrid (WLA-CdM), representado por su oficial de programas, el español Rafael Moreno López. EFE