¿Nos unen las diferencias? por Luis Barragán

¿Nos unen las diferencias? por Luis Barragán

Luis Barragán @LuisBarraganJ

A juzgar por sus críticos portátiles, el R2P, 187 y TIAR, escapan del realismo político. Diestros en las consignas, jamás explican lo que entienden por tal y las habilidades que exige, contentándose con la descalificación personal de los promotores de una iniciativa tan importante y muy probablemente definitiva.

Ha anunciado el presidente encargado de la República, recientemente, la aprobación parlamentaria de nuestra reinserción en el TIAR y, no por casualidad, entre quienes derrochan millones de bytes en su imaginaria defensa, aportan una buena dosis de confusión. Nada casual, desean neutralizar el anuncio y, reacomodándose a las circunstancias, como ocurrió con el no menos célebre 233, lo refieren para desenfocarlo como una herramienta real (SIC) de exitosa confrontación con la dictadura y lo delatan como un juego táctico a favor de los diálogos de Noruega, Barbados u otro lugar que esté por descubrirse.

Escribimos defensa imaginaria de los propios y extraños que conforman un sector tan particular, añadidos los arribistas de ocasión, porque también son imaginarios los ataques a Juan Guaidó. Y es que, embargados por una suerte de “guaidosismo” a la medida de las oportunidades halladas y por hallarse, no se explican en medio de un complejo proceso político, en el marco de una oposición plural, con retos decididamente históricos.





Poco importan las razones esgrimidas a favor del R2P, 187 y TIAR, porque tampoco les interesa que sus supuestos detractores pidan la palabra y, representándolos, den el debate en la plenaria de la Asamblea Nacional. El asunto está en el constante reacomodo en lo que comprenden como la órbita de poder de la oposición y, cohabitándola, en las posibilidades que pueda conceder la dictadura a las mafias; vale decir, al generoso cupo que ellas puedan abrir, aunque nuestros males se prolonguen infinitamente.

El fantasma de las elecciones parlamentarias, inquieta, pues, saben del empeño que el régimen tiene de realizarlas, pactando – incluso – el adelanto de la fecha. Dizque realizados los comicios presidenciales, regionales y municipales, con el concurso directo e indirecto de una oposición que faltó a los resultados de la consulta popular del 16/07/17, al calendario oficial desea emblematizar los parlamentarios, como puntualmente ocurría y ocurre, con todos los simulacros del socialismo real (SIC).

Luego, el trío amenaza la otra “oportunidad” que brinda la dictadura, pero – en el interín – persiste la rebanadura del actual parlamento trastocado el R2P, 187 y TIAR en una maldición. Y con ella, consecuente con el anuncio, debe romper el presidente encargado para liberar, en primera instancia, un proceso político ahora atascado en los predios de la simplicidad.

Un genial desplante de ironía, puede caracterizar a la oposición, siguiendo a Octavio Paz: nos unen las diferencias y nos dividen las coincidencias. Insospechadamente, el R2P, 187 y TIAR está llamado a resolver la paradoja, desde el venidero martes.