Las autoridades colombianas rescataron a 28 menores de edad venezolanos utilizados por redes de delincuentes para mendigar en las calles de Bucaramanga, capital departamental de Santander (este), informaron este miércoles fuentes oficiales.
El estatal Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) informó en un comunicado que “atiende a 28 niños venezolanos rescatados por la Policía en operativos contra la mendicidad en Bucaramanga”.
El pasado 11 de marzo, la Personería (entidad responsable de la defensa de derechos humanos) de esa ciudad alertó a la Alcaldía y a las demás autoridades de la proliferación de niños migrantes utilizados para mendicidad.
Este acto está tipificado por la ley colombiana como trata de personas y se castiga con penas de prisión que van de 13 a 22 años y millonarias multas.
Luego de la verificación de derechos realizada por las Defensorías de Familia del ICBF, se abrió procesos administrativos de restablecimiento de derechos a 13 menores de edad por diferentes vulneraciones.
La información detalla que de ese total, siete están con sus familias, cinco fueron ubicados en hogares sustitutos y uno ingresó a otra institución de protección.
Los otros 15 menores retornaron con sus familias, luego de que sus padres fueran amonestados por el defensor de Familia, lo que los obliga a asistir a un curso de buenas prácticas de crianza.
Las operaciones de rescate fueron desarrolladas por la Policía de Infancia y Adolescencia y el Grupo Especial Migratorio en parques, centros comerciales y otros lugares concurridos de la ciudad.
Antes esto, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez solicitó en una carta enviada al comandante de la Policía de Bucaramanga, brigadier general Manuel Antonio Vásquez, actuar con “celeridad y prontitud” para rescatar a las víctimas y salvaguardar sus derechos.
En la misiva solicita el “despliegue de operativos policiales pertinentes y necesarios en la ciudad, y en particular en los sectores afectados por bandas delincuenciales a fin de identificar y capturar a los actores intelectuales de estos esquemas de criminalidad”.
“Debemos velar por que se propicien ambientes sanos para el desarrollo de nuestros niños y niñas, lejos de la criminalidad y de esquemas de microtráfico y abusos”, aseguró Ramírez.
EFE