Iván Antonio Simonovis Aranguren, de 59 años, fue condenado a tres décadas de cárcel por su presunta responsabilidad en las muertes producidas en abril de 2002, en un incidente conocido como La Masacre de Puente Llaguno, durante el fallido golpe de Estado contra Hugo Chávez.
Diálogo / Revista Militar Digital / Marcos Ommati
Pero los defensores del ex policía insisten en que nunca se probó su culpabilidad, y que su arresto obedecía a una venganza política. Simonovis, ex jefe de seguridad de la Alcaldía Metropolitana de Caracas y ex Jefe Nacional de Operaciones, fue detenido cuando iba a viajar a los Estados Unidos, y condenado a 30 años de prisión. Debido a su estado de salud debilitada, después fue trasladado a detención domiciliar.
En mayo de 2019, a pesar de la fiscalización reforzada en su casa debido a un indulto firmado por el presidente interino de Venezuela Juan Guaidó, Simonovis realiza una escapada de cine, que involucró la escalada de una pared de 25 metros, el uso de un bote y de una avioneta para llegar a los Estados Unidos. Para hablar del presente y del futuro de Venezuela, Diálogo conversó con Iván Simonovis en Miami, donde tiene residencia temporal, además de una oficina en Washington, D.C.
Diálogo: ¿Por qué decidiste huir de tu casa, aunque sabías que habían reforzado la vigilancia?
Iván Simonovis: Redoblaron el número de policías frente a mi casa, se pusieron más quisquillosos, a mí me tomaban fotografías todos los días con un periódico del día. Yo tenía la foto, tenía un brazalete electrónico, y además, eso es el control típico que ellos tienen de entradas y salidas de la casa. Yo tenía restringido visitas, yo tenía restringido dar declaraciones, yo tenía restringido el uso de los medios, las redes sociales. Entonces fue cuando decidí que era hora de buscar una salida y buscar mi libertad. También me habían comentado que en una reunión en Miraflores con Maduro, se le planteó mi caso, porque querían soltar algunos presos políticos y llegaron a mi nombre, y él dijo: “No, ese que se seque dónde está. Que se muera ahí en esa vaina.” Todo apuntaba a que yo no iba a tener posibilidades de salir más nunca y que iba a envejecer dentro de mi casa solo y entonces fue cuando decidí huir de allí y salir del país.
Diálogo: ¿Hubo la ayuda de agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional? ¿Eso demuestra una ruptura entre los agentes del SEBIN y Nicolás Maduro?
Iván Simonovis: Es imposible que una persona como yo, o sea con el nivel de importancia que tiene Iván Simonovis para el gobierno, sin ningún tipo de documentación, salga de la casa en Caracas, y luego salga del país sin la ayuda de funcionarios militares y policiales. Hay una serie de funcionarios de policía y oficiales militares que están en contra de lo que está sucediendo en el país. Hay lo que llamo una memoria genética de lo que es la real, lo que es democracia, y ellos sencillamente no están satisfechos ni contentos. Ellos pasan por las mismas penurias que pasan todos los demás ciudadanos: falta de comida, falta de medicina, sueldos muy bajos, no están entrenados, no están equipados, o sea, unas condiciones extremadamente deplorables y esas personas me ayudaron a salir de Venezuela. Con el compromiso que una vez que yo estuviese en territorio americano, yo viera cómo articulaba reuniones, cómo podía yo ayudar, cómo podía yo dar información que ellos mismos me están suministrando, para de alguna forma agilizar la salida o la caída del régimen.