Cuba estableció el jueves nuevos controles de precios para bienes y servicios, desde productos agrícolas hasta taxis, en un esfuerzo por frenar la inflación tras un aumentó de los salarios y las pensiones estatales.
Los nuevos precios para el sector privado de La Habana incluyen algunos alimentos básicos como los frijoles, carne de cerdo, limones, plátanos, cebollas, col y melón.
En las últimas semanas, las autoridades de varias provincias aplicaron controles a las tarifas de taxis, bebidas y cortes de cabello, entre otros. Los controles difieren de una provincia a otra, según el Gobierno.
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, anunció el mes pasado que el gobierno adoptó una serie de medidas de emergencia para combatir el estancamiento económico que comenzó en 2015, cuando Venezuela, un aliado clave, cayó en crisis.
Las medidas incluyen un incremento salarial y de pensiones para más de 2 millones de empleados estatales que ascienden a 8.000 millones de pesos anuales, que equivale al 13 por ciento del presupuesto de 2019.
“Ahora, con los nuevos precios estamos súper asfixiados debido a que el campesino (granjero) que traslada los cerdos a La Habana tiene precios caros aún a 28 pesos la libra”, dijo Humberto Soler, de 48 años, mientras cortaba costillas de cerdo en su puesto de venta. Otros comerciantes consultados tampoco estaban contentos.
El precio del cerdo se fijó en 45 pesos por libra, que se compara con los 65 pesos cubanos previos.
Los nuevos precios se aplican a empresas estatales que dominan la economía, pero también al sector privado que incluye cooperativas, agricultores, pequeñas empresas y trabajadores independientes.
“Las medidas muestran una creciente preocupación por parte del Gobierno por la influencia en la economía de sectores agrícolas autónomos y cooperativos”, dijo Paul Hare, exembajador británico en Cuba.
Reuters