LeBron James volvió a una cancha de baloncesto después de que sus polémicas declaraciones sobre el famoso tuit de Daryl Morey, el que desató el conflicto entre China y la NBA, provocaran las iras de sus aficionados en Hong Kong, quienes quemaron sus camisetas en las calles.
El jugador de Los Ángeles Lakers ya avisó de que quiere alejarse de todo tipo de polémicas y centrarse en la conquista del campeonato y eso fue lo que demostró liderando un nuevo, y contundente, triunfo sobre los Golden State Warriors (126-93).
En apenas 25 minutos, “King” James alcanzó un doble-doble de 18 puntos y 11 asistencias justificando por qué su equipo lo quiere utilizar como base. El de Akron dio un recital a la hora de repartir juego para sus compañeros destacando especialmente un pase genial a Danny Green que lo tuvo todo: de espaldas, sin mirar y suspendido en el aire antes de caerse al suelo. El escolta no pudo desperdiciar la ocasión para anotar desde la esquina.
Pero no se quedaron ahí las buenas noticias para los Lakers. Tras su esguince de dedo, Anthony Davis regresó a la acción y lo hizo quedándose a las puertas de su primer triple-doble como jugador angelino (ocho puntos, 10 rebotes y ocho asistencias). Otros jugadores que destacaron fueron Avery Bradley (18 puntos y 4/5 triples), Quinn Cook (16 tantos y 4/5 tiros de tres) y Dwight Howard, que también dejó una buena conexión con LeBron y se fue hasta los 13 puntos y siete rechaces.
En el bando de los Warriors, que decidieron dar descanso a Stephen Curry, el más destacado fue D’Angelo Russell, máximo anotador del partido con 23 tantos.
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(?:@Lakers)pic.twitter.com/zQidiiiybK
— NBA Latam (@NBALatam) October 17, 2019