El presidente encargado de Venezuela, Juan Guaidó, envió un mensaje a los gobernadores del país, incluyendo a los pertenecientes al chavismo, sobre uno de los recientes anuncios emitidos por Nicolás Maduro.
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Maduro comentó durante una alocución que iba a darle “una mina de oro” a cada gobernador venezolano como un supuesto respaldo al presupuesto estadal. Una medida absolutamente arbitraria que además ejecutaría sin la autorización del Poder Legislativo.
“Los quieren convertir en traficantes de oro para comprar lealtades”, alertó Guaidó, quien enfatizó a los gobernadores que su implicación en tal actividad significaría su responsabilidad ilegal en la sustracción de recursos estratégicos de Venezuela.