Para los Astros suceden cosas mágicas cuando George Springer y Carlos Correa sacan la pelota en el mismo juego de postemporada. Algunas de las victorias más memorables del equipo en sus últimas tres aventuras de playoffs han visto a Springer y Correa hacer daño con los batazos largos.
Por Brian McTaggart / MLB.com
Traducción libre del inglés por lapatilla.com
Fue ese guión el que usaron los Astros para lograr una sorprendente victoria sobre los Dodgers en el Juego 2 de la Serie Mundial 2017, inclinando la serie a favor de Houston. Y más recientemente, el jonrón solitario de Springer en la quinta entrada del Juego 2 de la Serie de Campeonato de la Liga Americana el domingo permitió a Correa golpear a un ganador en la 11a entrada.
Entonces, cuando Springer lanzó un jonrón de tres carreras en la tercera entrada del Juego 4 del ALCS el jueves por la noche contra los Yankees en el Bronx, era apropiado que Correa siguiera su ejemplo con un batazo que impulsó tres carreras en la sexta entrada, ayudando a enviar a los Astros a una victoria 8-3 y una imponente ventaja de la serie 3-1.
Ahora, Houston buscará asegurar el tercer banderín en la historia de la franquicia, y el segundo en tres temporadas, con Justin Verlander en la colina en el Yankee Stadium contra James Paxton el viernes por la noche.
En todas las series de postemporada al mejor de siete, los equipos que tomaron una ventaja de 3-1 ganaron 73 de 86 veces (85%). Bajo el formato actual de 2-3-2, los que están delante de 3-1 y tienen la ventaja de local en la serie han ganado 39 de 46 veces (también 85%). Sin embargo, los Yankees pueden ver un ejemplo reciente en los Cachorros de 2016, que perdieron 3-1 frente a los Indios en la Serie Mundial antes de ganar tres juegos consecutivos, incluidos los Juegos 6 y 7 en el camino.