El Gobierno de España impidió que la Policía deportase a Delcy Eloína

El Gobierno de España impidió que la Policía deportase a Delcy Eloína

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Delcy Rodríguez. REUTERS / Maxim Shemetov

 

El Gobierno ha admitido este martes que intercedió por la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, para evitar que la Policía la deportara nada más pisar suelo español en cumplimiento de las sanciones impuestas por la Unión Europea. La portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, ha dicho que la intervención de José Luis Ábalos, revelada por Vozpópuli, evitó una crisis diplomática con Bruselas y Venezuela.

Por JORGE SÁINZ / vozpopuli.com





“Si esta persona hubiera entrado en territorio español se hubiera producido una crisis con la UE y Venezuela”, ha dicho. “Nuestra obligación era hacer cumplir las sanciones. Y esta persona nunca atravesó el control de fronteras”.

Esas sanciones obligaban a la Policía española a deportar a Rodríguez en el siguiente vuelo a Caracas, según han explicado fuentes policiales y aeroportuarias a este diario. Fuentes del Gobierno han admitido que si “Ábalos no hubiera intervenido, la Policía habría rechazado” a Rodríguez.

La vicepresidenta pasó varias horas en tránsito en el aeropuerto de Barajas hasta salir al día siguiente de España en un vuelo comercial rumbo a Doha. Algunas fuentes jurídicas consideran que impedir el cumplimiento de estas sanciones, es decir la deportación por parte de la Policía, podría constituir un delito de prevaricación.

Versiones contradictorias del Gobierno

Montero ha tratado de restar importancia a este extraño episodio que tuvo lugar la semana pasada. Según la portavoz, el Gobierno español tuvo conocimiento de que Rodríguez haría escala en España cuando su vuelo privado ya había despegado. Y ha explicado que la normativa española no obliga a identificar a los pasajeros en origen, sino en destino. Por eso, ha detallado, no se supo antes que la número dos de Nicolás Maduro iba en esa aeronave.

La portavoz ha señalado que Ábalos intervino a petición de los ministerios de Exteriores y de Interior porque se sabía que iba a estar en el aeropuerto. El ministro esperaba a su homólogo de Turismo venezolano, con el que ha dicho públicamente que mantiene una amistad.

La gestión de Ábalos consistió, según el Gobierno, en recordarle a Rodríguez que no podía pisar suelo español. El ministro de Transportes negó en un primer momento haberse reunido con la vicepresidenta de Venezuela, pero días después admitió un encuentro de 25 minutos a bordo del avión. El Gobierno también negó inicialmente que Rodríguez bajara de ese vuelo y más tarde reconoció que no sólo bajó, sino que se marchó al día siguiente a Doha en vuelo comercial.

“La gestión de Ábalos fue exitosa”, ha dicho. “Evitó que esta persona entrara en nuestro país”.

Dudas sobre la agenda de Rodríguez

Montero ha asegurado desconocer si la vicepresidenta venezolana tenía otros planes en España que no fueran únicamente la escala. Algunos medios del país sudamericano han especulado con que su intención era reunirse con dirigentes políticos y empresarios en España.

“Me es imposible ponerme en la cabeza de las intenciones de la señora Rodríguez”, ha señalado Montero. “Este país hizo la gestión diplomática para que no pisara suelo español. Cumplimos con nuestra obligación, tal como marcaba la UE”.

El episodio de Ábalos ha ocupado buena parte de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros del martes, a pesar de que el Gobierno niega polémica alguna. Montero ha defendido a Ábalos y ha asegurado que ha ido dando explicaciones a medida que se le demandaban. La portavoz ha recordado que la discreción es importante ante posibles crisis diplomáticas.

En cualquier caso, ha recordado que Ábalos, como el resto de ministros, comparecerá próximamente en el Congreso. Y que los grupos de la oposición podrán preguntar al titular de Transportes por este caso y y las cuestiones que crean oportunas.

Reunión con Torra el 6 de febrero

Por otro lado, Montero ha anunciado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el de la Generalitat, Quim Torra, se reunirán el 6 de febrero en Barcelona. Sobre el futuro de Torra, a quien se le reclama que devuelva su acta por su condena a inhabilitación, el Gobierno ha respondido que Torra sigue siendo de momento el presidente catalán.

“Es obvio que el presidente de la Generalitat es el señor Torra. No hay nada que haya dicho lo contrario”, ha dicho. “Si hay alguna incidencia o se pospondría o no se celebraría (el encuentro).

Montero no ha querido especular con la posible celebración de elecciones anticipadas en Cataluña. Y ha confiado en que este escenario no afecta al Gobierno de coalición PSOE-Podemos. En ese sentido, ha dicho que el Gobierno tiene intención de poner en marcha la mesa de diálogo bilateral Gobierno-Generalitat, que acordó con ERC, después de la reunión con Torra.