China aseguró hoy que el Gobierno de Estados Unidos no ha proporcionado “ninguna ayuda sustancial” a Pekín para luchar contra el coronavirus que tiene en jaque al país asiático y dijo que, “por el contrario”, ha hecho cosas que “podrían crear y extender el pánico”.
En una rueda de prensa a través de la aplicación de mensajería WeChat -para evitar las reuniones multitudinarias que el Gobierno chino desaconseja- la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Hua Chunying, señaló que desde el inicio del brote “algunos países han proporcionado apoyo y asistencia” para ayudar a China.
Sin embargo, Estados Unidos, añadió, fue el primero en evacuar al personal de su consulado en Wuhan -ciudad donde surgió el brote-, en sugerir la retirada parcial del de su embajada y en prohibir la entrada de chinos a su país, pese a que la Organización Mundial de la Salud (OMS) “dejó claro que no recomendaba o incluso se oponía a restricciones de viaje”.
“Lo que los Estados Unidos han hecho podría crear y extender el pánico”, afirmó la portavoz.
Hua destacó que “en un mundo globalizado, los destinos de todos los países están estrechamente vinculados” y consideró que “ante una crisis de salud pública, los países deben trabajar juntos para superar las dificultades en lugar de (…) empobrecer al vecino y sacar ventaja de las dificultades de los demás”.
Por otra parte, la portavoz reveló que hasta ayer, 2 de febrero, 16 extranjeros habían sido infectados por el nuevo coronavirus en China, de entre los cuales dos se han recuperado y 14 permanecen en cuarentena en situación estable.
Hua no precisó, sin embargo, la nacionalidad de esas 16 personas.
Las muertes causadas por el coronavirus de Wuhan en la China continental superan ya las que causó el Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS, por sus siglas en inglés) en 2003, ya que gran parte de las víctimas de aquella epidemia fueron en Hong Kong.
Según los datos facilitados hoy por la Comisión Nacional de Salud de China, el nuevo coronavirus ya ha causado en toda China 17.205 infectados y 361 muertos.
La única víctima mortal de esta epidemia registrada fuera de la China continental fue un hombre de 44 años que falleció el pasado día 1 en Filipinas.
La epidemia del SARS causó, según datos de la OMS, 765 muertos en todo el mundo, de los que 348 fueron en la China continental y 297, en Hong Kong.
El SARS fue mucho más mortífero de lo que lo está siendo hasta el momento el virus de Wuhan, que, con los datos conocidos hoy, mantiene por ahora una tasa de mortalidad del 2,09 por ciento, mientras que la de la epidemia que asoló China hace 17 años se situó cerca del diez por ciento.
Los 17.205 infectados por la neumonía de Wuhan anunciados hoy superan con creces, sin embargo, los 7.390 que causó la epidemia de 2002-2003 en toda China.
EFE