Al mando de José Félix Ribas los jóvenes estudiantes de Caracas se enfrentaron con decisión y coraje a José Tomás Boves quien se había erigido en el gran enemigo de la naciente república, violento y asesino cruel ,al percatarseque los patriotas no habían logrado convencer a los sectores populares de las ideas libertarias enarbolo en nombre del rey de España la bandera del odio social, que hoy se conoce como la lucha de clases, principal planteamiento del marxismo en su equivocada y miserable gestión que conduce a la ruina a los países que esclaviza.
A pesar del sacrificio de los jóvenes y la tesonera lucha por la independencia fracaso Venezuela en la guerra en esa etapa .José Félix Ribas fue capturado, asesinado y se frio su cabeza en público. Así era el horror de la guerra teñida del odio social.
Cuatro años más tarde en enero de 1818, el mantuano Simón Bolívar y el peón de hacienda José Antonio Páez en un estrecho abrazo unieron a los venezolanos sin distingos de clase o condición y a partir de ese momento cambio radicalmente el curso de la guerra de independencia que nos condujo a sellar la misma en Carabobo. La unión de los venezolanos sin distingos de clase fue la que produjo la victoria de la causa republicana.
Rómulo Betancourt en su discurso al regresar del exilio luego del derrocamiento de la tiranía de Pérez Jiménez señalo: la caída de la dictadura se logró no solo por la unión de los partidos, sino la unión de los venezolanos de todas las clases sociales y afirmó que estuvieron juntos La Charneca (barrio popular más emblemático de la época) y el Country Club caraqueño. Ello hizo posible la democracia.
Para salir de la actual situación hay que unir a los venezolanos y hay que desechar por traumática, anti histórica, acientífica y productora de miseria: la lucha de clases, fundamental herramienta comunista, que nos conduciría a la dictadura del proletariado, como condición previa a la felicidad de la sociedad. En Cuba y Venezuela los resultados de la lucha de clases están a la vista: ruindad y miseria, los jerarcas del régimen enriquecidos, opulentos y viven la lujuria del poder, mientras falta la comida, agua, los servicios públicos y todo lo que sea bienestar para los ciudadanos. La riqueza para los gestores de la lucha de clases y nada para los demás.
Las declaraciones de Miguel Pizarro, diputado de oposición al régimen y delegado ante las Naciones Unidas “sobre el sifrinazgo caraqueño” producen un toque de alarma, la dialéctica de la lucha de clases, admitida por alguien que se dice opositor usada contra los que llama el sifrinazgocaraqueño, habría que preguntarle ¿para salir de este infierno, lo haremos con la lucha de clases que nos ha llevado al mismo? Muchas reflexiones hay que hacer tales como ¿por qué más de Cinco Millones de venezolanos abandonaron su patria, luego de perder la fe? ¿Es buena una unidad stalinista, concebida como el acatamiento de todas las líneas y planteamientos de los que se han erigido, sin decisión democrática, en jefes de la oposición que no permita la discusión y que solo las elites políticas conduzcan a su antojo la lucha y quien disienta sea marginado?
Es tiempo de cambiar esquemas y dogmas que devienen de los postulados marxistas que nos han conducido a la peor situación que ha vivido Venezuela en su historia. Hay que unir a todos los venezolanos de cualquier clase social a la que pertenezca, religión, ocupación y afectos, todos somos útiles hay que combatir las ínfulas del dizque presidente obrero, que acabo con el bien estar y arrojo a los más pobres a la más grande miseria conocida. Gente que hasta inventodiscriminaciones raciales que solo están en su afiebrada y mendaz mente y que hablan de la resistencia indígena y acribillan por oro, diamantes y coltan a los indígenas del sur de Venezuela y persiguen a los de Amazonas, Amacuro y Zulia.
Es tiempo de dejar de practicar el odio de clases, pues tan venezolano es el rico, el clase media y el pobre, el enfrentar la miseria es tarea de todos, la búsqueda del bienestar y la riqueza debe ser la principal misión, pues tenemos elderecho a ser ciudadanos iguales en un país donde impere la ley. Como dijo el poeta, no hay que decir ni que se es bueno, ni que se es malo, lo que hay que hacer es amar lo libre en el ser humano. ¡Viva Venezuela, libre!