La OMS ha estado haciendo una alerta sobre aquellos pacientes más vulnerables a la hora de contraer el COVID-19 y que podrían tener mayores complicaciones. Este grupo incluye a aquellos que tienen patologías previas como: hipertensión arterial, obesidad, enfermedades cardiovasculares o cerebrovasculares y diabetes. Con respecto a esta última condición, la Dra. Amerindia Aguiar, médico internista y hematóloga, basó las siguientes recomendaciones de la American Diabetes Association, como un documento preventivo de conocimiento general para pacientes y familiares:
– ¿Las personas con diabetes tienen más riesgo de contraer COVID-19?
Hasta el momento no hay datos suficientes que demuestren que las personas con diabetes tienen más probabilidades de contraer COVID-19 que la población general. Pero, las personas con diabetes mal controlada, sí tienen mayor riesgo de complicarse y/o fallecer si se enferman por COVID-19.
– ¿Esta población tienen una mayor probabilidad de experimentar complicaciones graves por COVID-19?
Las personas con diabetes tienen más probabilidades de experimentar síntomas y complicaciones graves cuando se infectan con cualquier virus o bacteria, sin embargo, si la diabetes está bien controlada, el riesgo de enfermarse gravemente por COVID-19 es casi el mismo que el de la población general.
Cuando las personas con diabetes no se controlan bien y experimentan niveles de azúcar en la sangre elevados, generalmente corren el riesgo de sufrir una serie de complicaciones propias de la enfermedad, las cuales los hacen más débiles frente a otros problemas como son las infecciones.
Dentro de estas complicaciones están los problemas del corazón y los riñones.
– Durante la infección por COVID-19 ¿Cuáles son las descompensaciones más frecuentes que pueden presentar las personas con condición de diabetes?
Como en toda infección una de las primeras sustancias que se alteran en la sangre son los niveles de azúcar (glucemia), que tienden a elevarse. Una vez presente los síntomas pueden ir de leves a severos, siendo los leves: boca seca, mucha sed, orina muy amarilla, dolor de cabeza y calambres. Además, síntomas severos como orina oscura, mareos, confusión, alucinaciones y coma.
Si la persona comienza a presentar sequedad en la lengua, aumento en la sed o disminución en la frecuencia de los deseos de orinar, es posible que esté deshidratado.
Además, cuando la glucemia se mantiene persistentemente elevada el médico determinará también la presencia de una complicación conocida como cetoacidosis diabética, esta última es más frecuente en diabéticos tipo 1.
– ¿Cuáles son los síntomas que se deben tener en cuenta ante la sospecha de COVID-19?
Se debe prestar especial atención a la aparición de fiebre (temperatura > 38.5°C), tos seca y/ o falta de aliento. Algunos pacientes también pueden presentar náuseas y vómitos.
– ¿Qué se debe hacer ante la sospecha de COVID-19?
Si siente que está desarrollando estos síntomas, llame a su médico y debe tener a la mano
.- La lectura de glucosa (glucómetro)
.- Si es diabético tipo 1, debería tener también la lectura de cetonas
.- Lleve un registro de su consumo de líquidos (puede usar una botella de agua de 1 litro) y coméntele al médico
– ¿Cuáles son los síntomas de alarma ante la probable infección por COVID-19?
.- Dificultad para respirar
.- Dolor en el pecho al respirar o presión persistente
.- Estar desorientado o confuso
.- Coloración azul de labios o cara
.- Ante cualquiera de estos síntomas se debe acudir o ser trasladado de inmediato a la emergencia.
– ¿Qué se debe hacer para prevenir la propagación de COVID-19 en el hogar?
Para las personas con condiciones de salud como la diabetes, los miembros sanos de la familia deben comportarse como si fueran un riesgo significativo para ellos. Por ejemplo, deben asegurarse de lavarse las manos antes de alimentarlos o cuidarlos.
Si es posible, se debe establecer un área (cuarto) donde la persona con diabetes u otra condición de salud, se mantenga retirada del resto de la familia y dicho espacio debe estar siempre limpio. Es necesario que los utensilios no sean compartidos.
Si alguien de la familia pareciera estar enfermo o está en alguna condición de riesgo (es personal de salud activo o no puede cumplir la cuarentena por alguna razón), entonces se debe mantener la puerta cerrada y evitar el contacto con esta persona en particular.
Mientras dure el riesgo de contagio, es preferible mantener contacto con un solo miembro de la familia y que este sea encargado de prestar apoyo o cuidados.
Recuerde que una manera de reducir el riesgo de complicaciones, es mantenerse bien controlado.
.- Cuidar la alimentación
.- Cumplir el tratamiento para la diabetes de manera estricta, así como el resto de los tratamientos que se tengan
.- Evitar salir de su casa
.- Evitar el contacto innecesario con todos los miembros de la familia, en especial con aquellos que por alguna particularidad deban estar en contacto con otras personas
.- Cumplir las medidas de higiene
.- Verificar que cuenta con su tratamiento para un tiempo prolongado
.- Procurar tener las herramientas necesarias para vigilar la glucemia