Durante la pandemia de coronavirus, una de las aplicaciones que más han impactado en las dinámicas sociodigitales ha sido Zoom. Su crecimiento ha sido enorme, pero con la popularidad ha llegado la responsabilidad en torno a la seguridad y privacidad de los usuarios. Es por ello que los responsables de la plataforma trabajan con el fin de resolver algunos de los problemas que han hallado en este tópico.
A partir de este miércoles estará disponible la actualización 5.0 de Zoom, en la cual habrá un nuevo ícono de seguridad en donde se agruparán todas las funciones en torno a este asunto y se puede usar con el fin de, por ejemplo, bloquear reuniones rápidamente, eliminar a participantes de una conversación o restringir el uso compartido de la pantalla y el chat en las pláticas grupales.
Con esta nueva versión será posible habilitar las contraseñas de manera predeterminada para la mayoría de los clientes, mientras que los administradores tendrán la posibilidad de definir la complejidad de las claves para los usuarios comerciales de la aplicación.
Cabe recordar que hace unos días se dio a conocer más de 500.000 contraseñas de Zoom habían sido filtradas y se estaban vendiendo en la dark web. En algunos casos, los precios de esas combinaciones eran menores a un centavo de dólar, mientras que otras las regalaban.
Otra de las adiciones para esta nueva actualización es la función de la sala de espera, la cual estará activada para las cuentas básicas, las Pro y las educativas. Con esta herramienta, el anfitrión tendrá la posibilidad de retener a los participantes de la charla antes de que entren a la conversación colectiva.
Gran parte de estas actualizaciones están orientadas a evitar el Zoombombing, el cual es un fenómeno propia de la dinámica de la aplicación en donde un usuario que no fue invitado a la conversación interrumpe las conversaciones para transmitir contenidos que no son propios de la plática.
En las versiones anteriores de la app, no era posible configurar una contraseña para la reunión, por lo que no existía un filtro a partir del cual se evitaran las molestas intromisiones. Con las ediciones anteriores de la plataforma también era posible que los participantes compartieran su pantalla durante las juntas.
Algunas sugerencias que el usuario puede llevar acabo para evitar ser víctima del Zoombombing son no utilizar una identificación personal para convocar a una reunión o silenciar a los participantes cuando ingresen a la charla. Esto con el fin de que su llegada no resulte molesta para los demás usuarios.
Dentro del menú “Programar Reunión” también es posible limitar el uso compartido de pantalla o incluso evitar que participantes previamente eliminados vuelvan a ingresar a la conversación.
A partir de su crecimiento exponencial en el mes de marzo, Zoom ha trabajado con el fin de actualizar sus estándares de seguridad. Hasta el momento no cuenta con un cifrado de extremo a extremo, pero portales especializados en tecnología han notado una importante mejoría respecto a sus procesos relacionados con la privacidad de los usuarios.
Cabe mencionar que los responsables de la plataforma digital han respondida de manera clara y rápida a las solicitudes que tanto usuarios como organizaciones de derechos digitales les han hecho en torno a las funciones y privacidad que otorga la aplicación.
No obstante, es importante destacar que ninguno de los parches que se han implementado hasta el momento son infalibles. Su objetivo es minimizar los riesgos para los usuarios, pero estos también deben aportar sus propias medidas de seguridad con el fin de evitar cualquier tipo de intrusión en sus conversaciones privadas.