Ciudades de Miami-Dade anuncian fecha de reapertura
Varias ciudades del Condado Miami-Dade anunciaron que planean abrir ciertos negocios el 20 de mayo, dos días después que el resto del condado, y los restaurantes el 27 de mayo, más de una semana después.
Por: El Nuevo Herald
La ciudad de Miami está coordinando un plan con Hialeah, Miami Beach, Doral y Miami Gardens para reabrir ciertos negocios con la idea de reiniciar la economía local, que ha sido duramente afectada por la pandemia del coronavirus.
Las marinas de la ciudad de Miami reabrirán este jueves, y se espera que más de dos docenas de parques reabran el 20 de mayo, anunció el alcalde en una conferencia de prensa virtual junto con los alcaldes de otras ciudades del condado. El plan aún tiene que ser aprobado por el gobernador Ron DeSantis, quien excluyó a los condados Miami-Dade y Broward de la fase uno de la reapertura.
“Estamos anunciando conjuntamente que hemos cumplido los criterios de marcha para entrar en la fase uno”, dijo Suárez al comienzo de la conferencia en la cual también participaron los alcaldes de Hialeah, Miami Beach y Miami Gardens.
Suárez dijo que las ciudades abrirán sus negocios y restaurantes un poco después que el resto de Miami-Dade porque no les habían entregado las pautas del “la Nueva Normalidad” del Condado sino hasta un poco antes de la conferencia de prensa.
“Cinco minutos antes de esta llamada recibimos un libro de 184 páginas con las nuevas pautas del Condado” dijo Suárez, y añadió que el grupo de alcaldes tiene que ver y entender las reglas y educar a la industria de los restaurantes antes de decirles que pueden abrir.
Aún así, los alcaldes dijeron que esperan que la apertura unida de las ciudades sea exitosa y advirtieron que sin cumplir con las nuevas medidas la situación pudiera empeorar.
“Es muy importante tomar los pasos unidos”, dijo el alcalde de Hialeah Carlos Hernández. “Que el público entienda que es una responsabilidad de ellos también”, agregó.
Se espera que los detalles de qué categorías de negocios, junto con los límites de ocupación y otras regulaciones, se finalicen después de que los alcaldes terminen de analizar el plan de reapertura de Miami-Dade propuesto por el alcalde Carlos Giménez, y después que lo apruebe el gobernador DeSantis.
Durante una rueda de prensa virtual dos horas después, Giménez dijo que el plan de las otras ciudades de reabrir los distintos negocios en distintas fechas será problemático porque creará confusión entre los residentes del condado.
“Es desafortunado [que hayan tomado esa decisión], pero es el derecho de ellos poder hacerlo”, dijo el alcalde condal.
El alcalde también dijo que ha estado en contacto con los miembros de la Liga de las Ciudades del Condado, más no con los alcaldes de cada ciudad.
“Mi teléfono siempre está abierto… Normalmente yo llamo al gobernador”, dijo Giménez.
CIFRAS ESTATALES
Florida registró 479 nuevos casos de COVID-19 el miércoles y 48 muertes adicionales de residentes, elevando las cifras a 42,402 y 1,827 respectivamente.
Miami-Dade ha tenido 14,468 casos confirmados y 518 residentes han muerto, 13 de ellos anunciados por el Departamento el miércoles.
Broward ha tenido 5,998 casos confirmados y 267 decesos, y Palm Beach 4,176 casos y 254 muertes.
CENTROS DE VIDA ASISTIDA
A pesar de las recomendaciones del grupo de trabajo sobre coronavirus de la Casa Blanca, de que todos los residentes y el personal sean evaluados en las próximas dos semanas, el gobernador Ron DeSantis defendió el miércoles su decisión de no exigir pruebas universales del personal y los residentes en los centros de atención a largo plazo, pero abrió la puerta hacia la idea de permitir que los hogares lo hagan ellos mismos.
“Hemos liderado con las pruebas”, dijo DeSantis durante una conferencia de prensa rodeada de representantes de dos de los tres grupos comerciales de la industria en Florida que lo instaron a no reabrir el estado sin proporcionar pruebas adicionales al personal.
A diferencia de otros estados que han exigido pruebas diagnósticas de coronavirus de todos los residentes y el personal en hogares con ancianos frágiles, DeSantis ha avanzado un enfoque voluntario que permite a los hogares decidir si desean las pruebas. El estado espera enviar un “equipo de ataque” de la Guardia Nacional para realizar pruebas cuando el hogar ya haya informado que tiene personal o residentes que muestran síntomas de COVID-19, expuestos al virus o que dieron positivo, y dijo que de esa manera le han hecho la prueba a alrededor de 32,000 residentes en las últimas tres o cuatro semanas.
Sin embargo, los registros publicados esta semana muestran que los funcionarios de salud han hecho pruebas solo a alrededor del 4% de las instalaciones de atención a largo plazo del estado entre el 11 de abril, cuando el gobernador afirmó que estaba acelerando las pruebas, y el 11 de mayo. Durante ese tiempo, los “equipos de ataque” de la Guardia Nacional evaluaron a unos 13,000 residentes y personal en 150 centros de atención a largo plazo, solo el 4% de los 3,800 hogares de atención a largo plazo en el estado.
Hay casi 700 hogares de ancianos y 3,100 centros de vida asistida en Florida con más de 150,000 residentes, 776 han muerto.
ESTADOS UNIDOS
Un ex funcionario de salud del gobierno de Estados Unidos advertirá al Congreso este jueves que el país enfrentará su “invierno más oscuro” en décadas si no logra desplegar una respuesta coordinada contra la pandemia de coronavirus.
“Si no logramos desarrollar una respuesta nacional coordinada, fundamentada en la ciencia, temo que la pandemia será aún peor y prolongada, causando enfermedad y muertes sin precedentes”, dijo Rick Bright, ex director de la agencia gubernamental responsable del desarrollo de una vacuna contra el coronavirus, destituido de su cargo el mes pasado.
El testimonio de Bright se dio a conocer este miércoles, un día antes de que comparezca ante el subcomité de salud de la Cámara de Representantes, donde se espera que haga sonar la alarma sobre las medidas inadecuadas que está aplicando el gobierno.
Según sus palabras, “sin una planificación clara y una implementación de los pasos” que él y otros expertos han delineado, el de 2020 será para Estados Unidos “el invierno más oscuro de la historia moderna”.
Al cierre de esta edición Estados Unidos tenía más de 1.38 millones de casos confirmados de COVID-19 y más de 83,700 personas que han muerto a causa de la enfermedad según las cifras de la Universidad John Hopkins.