Baterista “abandonó” a Satanás tras despertar de un coma por el coronavirus

Baterista “abandonó” a Satanás tras despertar de un coma por el coronavirus

Will Carroll, durante una presentación en el Aftershock Festival, en Discovery Park, el 22 de octubre de 2016. | Foto: Getty Images

 

Will Carroll es un sobreviviente del coronavirus con una gran historia para contarte. Baterista de heavy metal de diferentes bandas, se contagió de COVID-19 mientras estaba de gira con la agrupación Death Angel a principios de marzo. Su condición se agravó de tal manera que pocos esperaban un final feliz, pero sucedió.

Por Cnet





El 30 de abril, el rockero se despertó de un coma doce días después de dar positivo por coronavirus. “El personal médico no podía creerlo. Estaban extasiados porque era una historia de éxito”, dijo Carroll a The San Francisco Chronicle. Según el artículo publicado el 15 de mayo, el Centro Médico del Pacífico de California probó todos los tratamientos de los que había oído hablar, desde hidroxicloroquina y azitromicina hasta el fármaco experimental remdesivir.

El doctor George Horng explicó al SF Chronicle que se desconoce cuál medicamento hizo una diferencia significativa, pero aseguró que lo que sí ayudó fue poner al músico boca abajo durante 18 horas al día, mientras estaba en el ventilador para mejorar la oxigenación en el cuerpo. Esto resultó tan útil que el personal desarrolló un sistema para voltear pacientes con COVID-19 que necesitaban ventilación mecánica.

Pero si ya la historia parece de película, aun hay más. Carroll contó que mientras estaba en coma, se vio a sí mismo dejar su cuerpo y descender al infierno, donde Satanás, una mujer en su caso, lo castigó por el pecado mortal de la pereza, transformándolo en un monstruo similar a “Jabba The Hutt”, el malvado de Star Wars, y vomitó sangre hasta que sufrió un ataque al corazón.

“Me desperté en la cama del hospital con tubos entrando y saliendo de mí, y había una enfermera allí. Mis primeras palabras fueron: “¿Todavía estoy en el infierno? Y ella me ignoró”, relató Carroll, quien cumplió 47 años el miércoles 13 de mayo. Esta experiencia, según confesó al SF Chronicle, le llevó a repensar sus hábitos. Ahora desea dejar el alcohol y reducir el consumo de marihuana.

Carrol también cambió de fe. Ahora cree en un poder superior, pues siente que las oraciones de su familia y amigos lo ayudaron a salir adelante. “Todavía voy a escuchar metal satánico. Y todavía amo a Deicide y bandas como esa”, dijo el sobreviviente. “En cuanto a mi vida personal y mi experiencia de lo que pasé, no creo que Satanás sea tan genial como solía ser”, concluyó.