Space X, la empresa de transporte aeroespacial fundada por Elon Musk, suscribió un acuerdo con el Ejército de EE.UU. para probar los satélites Starlink en comunicaciones militares. El convenio se firmó el 20 de mayo, informó este martes el portal Space News, citando a una fuente interna.
Según el reporte, el contrato establece un plazo de tres años para que el Ejército pueda evaluar el servicio y su capacidad para cubrir las necesidades de transferencia de datos que necesita esa división gubernamental. De igual modo, se analizará el rendimiento del servicio de Internet.
Las pruebas se realizarán bajo las reglas del Acuerdo Cooperativo de Investigación y Desarrollo (CRADA, por sus siglas en inglés), que generalmente es utilizado por los militares para ensayar las tecnologías del sector privado antes de comprarlas.
A tales fines, SpaceX tiene ya cientos de satélites Starlink orbitando el planeta, con una red de banda ancha que espera cubrir la demanda global de Internet de alta velocidad.
El objetivo es poner en órbita un total de 42.000 satélites dentro de una década, y para ello Musk espera lanzar 1.400 satélites este año, con un plan de 60 de esos artefactos cada dos semanas.
Sus dispositivos han sido criticados por astrónomos y otros profesionales, con el argumento de que obstruyen la observación del cielo debido a sus destellos. Las agencias espaciales han considerado incluso facturar a compañías como SpaceX por cada satélite lanzado, en la esperanza de reducir la proliferación de “basura espacial”.
Así lo reseñó RT