Una de las preguntas que muchos se hacen es cuán digital será el trabajo y el lugar de trabajo después de la pandemia y la respuesta es mucho.
Especial de Laszlo Beke
El uso y la penetración de la tecnología de la información en las empresas fue un esfuerzo que arrancó hace unos 70 años y por mucho tiempo los desarrollos tecnológicos eran inicialmente probados en las grandes corporaciones, que disponían de los recursos económicos y el personal especialista que podía llevar a la práctica esos avances. A medida que los costos de las combinaciones de hardware y software disminuían era factible migrar esas tecnologías a empresas medianas y pequeñas. Este patrón se cumplió por varias décadas, hasta la llegada de Internet y del teléfono inteligente, y se creó un mercado de software de consumo que incluso rebasó varias veces la magnitud del mercado de software corporativo y que ha llevado a la aparición o desarrollo de la mayoría de los gigantes actuales: Amazon, Apple, Facebook, Google y Microsoft.
Dentro de las empresas la adopción de las nuevas tecnologías ha sido responsabilidad de las unidades de tecnología y ha continuado siendo un proceso que se maneja desde arriba con equipos humanos especializados. El Covid-19 aceleró un cambio que se había venido moviendo lentamente, el del trabajo a distancia e hizo descubrir un mundo de posibilidades, pero también de carencias y de necesidades que involucraba directamente al empleado. Pasamos del PC a Internet, a teléfono inteligente, a la Nube y a partir del Covid-19 comenzaremos la Era Digital de Inteligencia Artificial e Internet-de-las-cosas. Este nos lleva directamente a un Espacio de Trabajo Digital, que se extiende desde las oficinas hasta los hogares o cualquier lugar adonde se conecte un empleado.
La expansión del ámbito de TI
En la empresa y desde la perspectiva de tecnología, Covid 19 expandirá el ámbito de acción de TI e impactará el Lugar de Trabajo, el Trabajo, el Negocio y las Herramientas para el trabajo. El Covid-19 ha demostrado que las empresas operan bajo fragilidad y que a futuro necesitan considerar la resiliencia como uno de los elementos claves, ello les debe llevar a desarrollar la capacidad para enfrentar situaciones extremas como las vividas en esta pandemia. Esto se extiende ahora al aspecto de la tecnología, las empresas ahora necesitan pensar en Resiliencia Digital, en los sistemas de empresa, extendidos a la fuerza de trabajo en la empresa y en el hogar para lograr resultados en el negocio. Esto incluye usar algoritmos, bots y asistentes personales virtuales, pero también integrar los empleados del Front-Office y los del Back-Office, a los clientes, a los aliados, a las suplidores y también a las cosas.
Destrezas Digitales de los empleados
El Covid-19 ha demostrado que hay una brecha entre la tasa de introducción de tecnología y dependencia de ella y las destrezas digitales de los empleados. Destreza Digital es la ambición y habilidad de vivir y trabajar en forma digital. Se requiere Destreza Digital para los empleados, tanto en la oficina como en remoto para mejorar la experiencia del empleado. Para lograr eso se necesita disponer de tecnología fácil de usar, una implementación atractiva y motivadora y disponer de la infraestructura apropiada en la casa.
Impacto de Covid 19 – en el Trabajo
Encuestas recientes indican que la mezcla de trabajo en oficina-remoto se convierte en la norma, cuando las empresas indican que su aceptación pasó de 30% a 48% desde la pandemia. La proporción de empleados que desean un ambiente mixto es todavía mayor, se estima que en una proporción superior al 80%. Esto además conlleva el hecho que donde y como se trabaja pasa a ser más discrecional, aumentando la tolerancia hacia una atmósfera menos profesional en el ámbito remoto. Curiosamente se desarrolla mayor confianza entre los miembros del equipo y el gerente o líder. Los procesos analógicos que requerían papel y que demostraron ser frágiles son digitalizados
En el mediano y largo plazo la evolución del trabajo se centrará en tecnología: la mejora de procesos pasará de incremental a contínua, las respuestas serán en tiempo real, Inteligencia Artificial sera programable directamente por las personas, se manejará data desconocida y patrones ocultos, el aprendizaje será rápido y formará parte del flujo del trabajo, la cultura organizacional será más cuidadosamente dirigida y organizada, los roles cambiarán con más frecuencia, el liderazgo será más situacional y engranado, la innovación será contínua y abierta. El crecimiento profesional podrá ser vertical y horizontal y los objetivos de adquisición de destrezas digitales se convierten en esenciales para el desarrollo de la carrera del empleado.
Herramientas para el trabajo
La clave serán las Aplicaciones de Productividad en equipo, donde los ejemplos más relevantes son: Microsoft 365 (antes Office 365), G Suite de Google o el uso de los mejores productos individuales que incluyan colaboración en el trabajo, creación de contenido, administración del trabajo colaborativo, colaboración en contenido, correo, calendario y soluciones para reuniones. Estará enmarcada dentro de la automatización e Inteligencia Artifical, manejo de contenido y analíticos. La máquina para apoyar el trabajo (software y hardware) tendrá que ser más: móvil, creativa, colaborativa, analítica, automatizada, integrada, ágil y disfrutable.
El artículo incluye conceptos manejados en material de presentaciones de Gartner. También aparece en mi blog https://bit.ly/2XB6pXw.