Daniela Quiñonez, estudiante de octavo semestre de Administración de Empresas de la Universidad Eafit, se ha convertido en un símbolo del maltrato que sufren las mujeres en este país. Apareció flotando en el río Cauca en Colombia, despojada de toda dignidad.
Con información de Las2Orillas y Semana
El único pecado que cometió fue haberse negado a acostarse con Santiago García Zamora. El hombre, con la furia e importencia que caracterizan a tantos colombianos que odian a las mujeres cuando son rechazados, la apuñaló en la cabeza y luego la lanzó al río Cauca.
Un juez envió a la cárcel a García Zamora, por su presunta responsabilidad en la muerte de la universitaria Daniela Alexandra Quiñones Pimienta, en Marmato, Caldas. El hombre fue detenido en la noche del 17 de junio por orden de la Fiscalía.
Por lo tanto, un fiscal de la Dirección Seccional Caldas adelantó las audiencias preliminares en las que le imputó a García Zamora el delito de feminicidio agravado, respaldado en las entrevistas a testigos, valoraciones,reconocimiento en álbumes fotográficos y registros fílmicos, que demostrarían la presunta responsabilidad del imputado, quien no aceptó los cargos.
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La joven Daniela Alexandra Quiñones Pimienta desapareció desde el domingo en la madrugada en el municipio de Marmato, Caldas. Tras la intensa búsqueda, su cuerpo fue hallado desnudo en estado de descomposición a la orilla del río Cauca en la parcelación Túnez, en La Pintada (Antioquia), el pasado martes 16 de junio.
Daniela tenía 23 años, su familia vive en Marmato, Caldas, pero desde hace algunos años ella estaba radicada en Medellín donde estudiaba Administración de Empresas en la Universidad Eafit, y cursaba el octavo semestre de la carrera universitaria y estaba próxima a iniciar las prácticas profesionales.
Sin embargo, debido al cese de clases en todas las instituciones educativas del país, por cuenta del confinamiento que generó el coronavirus, Daniela optó por regresar a su pueblo desde hace dos meses, todo con la intención de pasar la cuarentena con su mamá y poder ayudarla en una droguería que recién había empezado a funcionar en el sector conocido como El Atrio.
En el informe de Medicinal Legal se evidenció que la estudiante universitaria presentaba heridas con arma blanca, hematomas en diferentes partes del cuerpo, así como señales de maniobras de sujeción.
El fiscal a cargo del caso determinó que Daniela Alexandra Quiñones asistió a una fiesta en el municipio de Marmato, en la que habría conocido a su presunto agresor Santiago García Zamora en el sector El Tejar, de la vereda El Llano, con quien según testigos, salió en una motocicleta.
Tras la desaparición de la joven, las autoridades recibieron la denuncia en la que se indicó que García Zamora fue la última persona con la que fue vista la víctima.
“Luego de haberse entregado y materializado la captura, el hombre dio versiones contradictorias sobre los hechos, entre ellas, haciendo alusión a un supuesto accidente que sufrieron ese día en la moto, razón por lo cual él habría abandonado a la joven en una estación de gasolina”, indicó la Fiscalía.
Sin embargo, en el desarrollo de las labores investigativas, los uniformados de la Sijín advirtieron incongruencias en las versiones del indiciado. Además, pudieron valorar que las lesiones que este presentaba en el rostro y escoriaciones en el cuerpo no eran características de una caída en moto.
De acuerdo con la investigación, el hombre habría llevado a la joven a una zona de espesa vegetación, a orillas de la carretera, donde al parecer tuvieron una discusión y García Zamora la habría agredido hasta causarle la muerte.
“En el lugar de los hechos y en medio de labores de policía judicial, los investigadores hallaron ropa interior y una chaqueta que vestía la universitaria ese día”, concluyó el ente acusador.