Lo que a inicios de la cuarentena se había convertido en el mejor aliado de los venezolanos a la hora de resolver sus compras, en la actualidad se convirtió en un dolor de cabeza y es que las tarifas por el servicio de delivery ya igualan o hasta superan el precio del producto solicitado.
Daimar Díaz || LA PRENSA DE LARA
Las quejas de los venezolanos ante los altos cobros con el que cotizan el servicio se hicieron sentir, pues expresaron que ya no pueden estar en la comodidad de su hogar y realizar algún pedido bien sea de comida o de algún producto, pues la tarifa que deben cancelar por recibirlos en casa va desde los 3 dólares en adelante dependiendo de la zona.
Fabiola Castañeda comentó que en junio realizó un pedido de un perfume de una reconocida marca del país, el mismo tenia un valor de 3 dólares, pero su sorpresa fue al conocer el monto que debía cancelar por el servicio de delivery, pues este igualaba el costo del perfume.
“Debía cancelar seis dólares los cuales eran tres por el perfume y tres dólares más, por el servicio de traerlo a mi casa; preferí cancelar la compra y hacer el sacrificio de ir hasta la tienda y ahorrarme ese dinero“, manifestó Castañeda.
Este caso también se presenta con los comercios de alimentos, pues algunos tabulan sus tarifas dependiendo de la cercanía del destino con el local, pues es el caso de los envíos que sean desde la zona centro y se dirijan hasta el oeste de la ciudad su valor mínimo es de 4 dólares y además deben realizar un pedido no menor a esta cantidad.
“Trabajo en la zona industrial III (Lara), y pedir comida de locales que se encuentren en el centro de la ciudad sean reconocidos o no debo pagar 4 dólares por el envío, es una tarifa excesiva. Ya el delivery no es la solución sino parte del problema“, aseveró Óscar Martínez, trabajador del sector.
Pese a que ahora hay más trabajadores de estos servicios, son pocos los que son contratados, pues la mayoría de los venezolanos expresa que no pueden darse el lujo de pagar tan altas tarifas por un servicio que en ocasiones demora en llegar y que además con el pago del mismo pueden comprar doble ración de comida o producto en el establecimiento comercial.