Nueva York, la única gran ciudad estadounidense que planea un retorno presencial a la escuela, aplazará la fecha del regreso a clases al 21 de septiembre para poder implementar más medidas de mitigación del coronavirus exigidas por los maestros, que amenazaban con una huelga.
En vez de comenzar el 10 de septiembre, como estaba previsto, las clases en línea para los 1,1 millones de alumnos del mayor distrito escolar estadounidense comenzarán el 16 de septiembre, y las clases presenciales, dos o tres veces por semana, el 21, informó el alcalde Bill de Blasio en una conferencia de prensa.
El plan prevé protocolos de uso de máscara todo el día, distanciamiento social, una mejora en la ventilación de los salones, menos alumnos por salón, un enfermero en cada escuela, la exigencia de tests negativos del virus para el personal, y si la tasa de contagio del virus supera el 3% (actualmente es de 0,9%) las clases serán suspendidas.
Como parte del acuerdo con los maestros, la ciudad implementará un sistema en las escuelas para testear cada mes a entre 10 y 20% del alumnado y del personal.
El sindicato UFT, que reúne a la mayoría de los 75.000 maestros de la ciudad, amenazaba con hacer huelga si el gobierno municipal no implementaba más medidas de seguridad en las más de 1.700 escuelas de la Gran Manzana.
“La ciudad de Nueva York tiene ahora las políticas y salvaguardas más agresivas de cualquier ciudad de Estados Unidos” para mitigar el contagio en escuelas, se congratuló Michael Mulgrew, presidente del sindicato UFT, en Twitter.
“Una de las cosas que hemos afirmado en estas discusiones (con el sindicato) es que nada reemplaza la educación en persona”, indicó De Blasio.
Pero muchos padres temen un contagio y más de 365.000 niños y jóvenes (37% del total) han optado por tener solo clases en línea, según cifras del gobierno municipal.
El regreso presencial a clases se ha politizado en plena campaña para las elecciones de noviembre desde que el presidente estadounidense, Donald Trump, llamó a la reapertura total de todas las escuelas del país, sin importar las tasas de contagio del coronavirus.
Estados gobernados por los republicanos como Mississippi, Georgia, Tennessee o Indiana avanzaron en este sentido en agosto. Pero surgieron brotes debido a los altos niveles de contagio y algunos establecimientos han tenido que imponer una cuarentena o cerrar.
Otras grandes ciudades como Chicago, Houston, Los Ángeles, Filadelfia o Miami optaron por no arriesgarse y ofrecen solo cursos virtuales.
AFP