Euforia y alegría era lo que se vivía en el país la noche del 12 de septiembre de 2015, al momento que todos vieron cómo retumbó el “Gloria al Bravo Pueblo” en el Palacio de los Deportes en México, luego de que la selección venezolana de baloncesto se coronara en el preolímpico FIBA Américas.
Por: Félix Mendoza / lideresendeportes.com
Los 12 Héroes de México que conformaron la hazaña fueron: Miguel Marriaga, Gregory Vargas, John Cox, David Cubillán, José Vargas, César García, Javinger Vargas, Miguel Ruíz, Windi Graterol, Heissler Guillent, Dwight Lewis y Néstor Colmenares.
Estos 12 guerreros se apoderaron de ese escenario y se impusieron con una gran victoria ante Argentina con pizarra 76-71, así escribieron una nueva página en nuestro baloncesto.
“Fue una hazaña bastante importante, nada más no clasificamos a los Juegos Olímpicos, sino la primera vez que quedamos campeones de América”, declaró la “Bestia” Colmenares en exclusiva para Líder.
Con el cupo sellado a los Juegos Olímpicos de Río 2016, los dirigidos por el argentino Néstor ‘Che’ García saltaron al tabloncillo decididos a implantar su ritmo de juego, pero los gauchos picaron adelante, esto no fue impedimento para la Vinotinto de las Alturas, que se apoyaron en el “Sastre” Guillent que se creció durante el certamen y en el duelo terminó con 15 puntos. Además, formó parte del quinteto ideal de ese torneo.
Comienzo irregular
El arranque de los criollos en ese preolímpico fue un poco irregular, terminando la fase de grupos con récord de 2-2, que le bastó para avanzar a segunda ronda.
Después, Venezuela derrotó a República Dominicana, cayó ante Uruguay y se metió en semifinales al vencer a Panamá.
Agónico pase a Río
El siguiente rival de los nacionales a derrotar era la selección de Canadá, que contaba en su plantilla con nueve jugadores NBA. Este compromiso es el más recordado de ese torneo, paridad y sufrimiento hubo hasta el final.
Restando cinco minutos para terminar el juego, los canadienses dominaban, pero los criollos empezaron una remontada.
“Los dos partidos tanto Canadá como Argentina fueron muy difíciles pero con Canadá jugábamos el pase a los Juegos Olímpicos pienso que en ese juego teníamos más presión”, comentó Guillent.
Entretanto, la tensión creció cuando en los segundos finales, el base Gregory Vargas recibió una falta de Aaron Doonerkan en la lucha por un rebote, seguidamente el “Súper ratón” encestó uno de los dos tiros libres para vencer 79-78 y meter a Venezuela a una cita olímpica 24 años después, para emular a los “Héroes de Portland”.
Presión y nerviosismo
“En el momento del tiro libre pensaba muchas cosas, en cinco segundos me pensé muchísimas cosas, sabíamos que teníamos la oportunidad de ir a Río si acertaba uno de esos tiros libres, me concentré, estaba muy nervioso, pensé en cosas negativas, pensando en que si fallaba nos íbamos a tiempo extra y se nos iba a complicar, y allí me pude concentrar, pude ver que mis compañeros me estaban apoyando, sentir ese día en la cancha todo el público nos estaba apoyando y en Venezuela todos estaban con nosotros, me concentré para poder anotar”, enfatizó el menor de los Vargas para Líder.
Todo el país vivió esa clasificación y el logro de la corona en ese campeonato, el quinteto lo celebró a lo grande con el ‘Che’ García y todo el cuerpo técnico en el tabloncillo. De ese momento todos recuerdan la imagen del técnico de la Vinotinto corriendo y gritando por todo el tablocinllo, celebrando el logro conseguido.
“Ese día cuando Gregory encestó el tiro libre fue una alegría demasiado buena para mí, se me salieron las lágrimas, empecé a llorar, yo nunca acostumbro a llorar después de lograr un campeonato, pero ese día fue bastante importante para mí ya que habíamos logrado algo histórico. Fui a abrazar al coach ‘Che’ García y a celebrar con Heissler”, detalló Colmenares.